Con su victoria en Lieja, Pogacar cierra una temporada de clásicas espectacular
LA NACION
El ciclista esloveno Tadej Pogacar logró en solitario su tercera victoria en la Lieja-Bastoña-Lieja, la 'Decana' de las clásicas ciclistas, y suma ya 9 'Monumentos' en su palmarés, confirmando que es el mejor corredor de la actualidad.
Pogacar cimentó su victoria con un ataque en las rampas más duras del Col de La Redoute, a poco más de 30 km para la meta, aventajando en más de un minuto al italiano Giulio Ciccone y al irlandés Ben Healy, que completaron el podio.
Anunciado como el mayor rival de Pogacar para la victoria, el belga Remco Evenepoel, ganador de la prueba en 2022 y 2023, no aguantó el ritmo de los mejores y acabó a más de tres minutos del ganador.
Con esta victoria, Pogacar pone un broche de oro a la primera mitad de la temporada, la de las clásicas ciclistas, siendo el único ciclista de la historia, junto al legendario belga Eddy Merckx, que gana en un mismo año el Tour de Flandes y la Lieja-Bastoña-Lieja.
- Noveno 'Monumento' -
"Es genial acabar la primera parte de la temporada de esta manera. La temporada ha sido hasta ahora perfecta. Estoy muy feliz", declaró tras la carrera.
El campeón del mundo, que corrió con un mensaje en su dorsal a su suegra, fallecida hace tres años, es el primero en subir al podio en seis 'Monumentos' consecutivos.
Se une a Fausto Coppi, Sean Kelly y Constante Giardengo en la tercera plaza de los corredores con más 'Monumentos' de la historia, lejos aún de las 19 victorias de Merckx.
Su victoria en Lieja cierra una campaña de clásicas en las que Pogacar ha brillado en todos los terrenos, con cuatro victorias (Strade Bianche, Tour de Flandes, Flecha Valona y Lieja-Bastoña-Lieja), dos segundos puestos (París-Roubaix y Amstel Gold Race) y un tercero (Milán-San Remo).
Como estaba previsto, el esloveno en La Redoute, a unos 34 km para la meta, tomando rápidamente unos segundos de ventaja sobre sus rivales: 16 segundos al británico Thomas Pidcock y a Healy y 19 sobre el pelotón, encabezado por Evenepoel.
El equipo del campeón olímpico belga "controlaba la carrera, pero de repente todos desaparecieron", explicó sorprendido Pogacar. "Pensaba que se reservaban para La Redoute, pero cuando miré a mi alrededor y vi que (Evenepoel) no venía, me animó a atacar".
- Sin noticias de Evenepoel -
El campeón del mundo continuó con su recital en solitario y ampliaba diferencias a la misma velocidad que engullía kilómetros en las soleadas carreteras belgas.
Por detrás, la lucha por el podio. Healy se mantuvo fugado, pero cambió de compañero, el italiano Giulio Ciccone en lugar de Pidcock, atrapado por el pelotón.
A la entrada en Lieja la victoria estaba decidida a favor del casi imbatible Pogacar, que aventajaba en casi minuto y medio al dúo perseguidor y en algo menos de dos minutos sobre el pelotón.
Tal fue su superioridad que el esloveno tuvo tiempo de saludar dando al mano a algunos espectadores antes de cruzar la línea de meta.
El esloveno de 26 años se tomará ahora un descanso para preparar el gran objetivo de la temporada, el Tour de Francia, donde buscará una cuarta victoria. "Estoy contento de volver a casa", admitió el esloveno.
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