cumbre del g20 presta más atención al "sur global" a la espera de cambios en eeuu
(Actualiza con detalles)
Por Lisandra Paraguassu, Anthony Boadle, Eduardo Baptista y Jake Spring
RÍO DE JANEIRO, 18 nov (Reuters) -
Los líderes del Grupo de las 20 principales economías debatieron el lunes propuestas para reducir la pobreza, apoyar a los países en desarrollo y reformar las instituciones mundiales para dar más voz al "Sur Global", mientras se preparaban para los cambios a la política exterior de Estados Unidos.
Los líderes del G20 se reúnen en el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro durante dos días, con una agenda que pone de relieve un orden mundial cambiante a la espera de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, vuelva al poder.
Las discusiones sobre comercio, cambio climático y seguridad internacional chocarán con los bruscos cambios en la política estadounidense que Trump, que asumirá el cargo en enero, ha prometido, desde aranceles hasta acabar con la guerra en Ucrania con una solución negociada.
Aun así, los líderes reconocieron que la agenda del G20, definida por el presidente de este año, Brasil, y reforzada por el anfitrión de 2025, Sudáfrica, ya está empujando las conversaciones más allá de la tradicional zona de confort de las potencias occidentales.
"Estamos experimentando un cambio muy, muy importante en las estructuras mundiales", declaró el canciller alemán, Olaf Scholz, al margen de la cumbre, señalando el creciente peso de las principales economías en desarrollo. "Son países que quieren tener voz. Y ya no aceptarán que todo siga siendo como ha sido durante décadas".
El presidente chino, Xi Jinping, aprovechó la ocasión para anunciar una serie de medidas destinadas a apoyar a las economías en desarrollo del "Sur Global", desde la cooperación científica con Brasil y las naciones africanas hasta la reducción de las barreras comerciales para los países menos desarrollados.
En su discurso de apertura, Lula dijo que los efectos devastadores de un clima cambiante pueden verse en todo el mundo, y pidió a los líderes que actúen para hacer frente al calentamiento global y la pobreza.
La alianza que lanzó, que coordina los esfuerzos mundiales para erradicar el hambre y la pobreza, cuenta con el respaldo de la Unión Africana y la Unión Europea, organizaciones internacionales, bancos de desarrollo y entidades filantrópicas como la Fundación Rockefeller y la Fundación Bill y Melinda Gates.
"El hambre y la pobreza no son el resultado de la escasez o de fenómenos naturales (...) son el producto de decisiones políticas", sostuvo Lula. "En un mundo que produce casi 6.000 millones de toneladas de alimentos al año, esto es inaceptable".
Los diplomáticos que redactan un comunicado conjunto para los líderes de la cumbre han luchado por mantener unido un frágil acuerdo sobre cómo abordar la escalada de la guerra de Ucrania, incluso un vago llamamiento a la paz sin críticas a ninguno de los participantes, dijeron las fuentes.
Un ataque aéreo ruso masivo sobre Ucrania el domingo sacudió el poco consenso que había, con los diplomáticos europeos presionando para revisar la redacción previamente acordada sobre los conflictos globales.
Estados Unidos también ha levantado los límites anteriores sobre el uso por parte de Ucrania de armas de fabricación estadounidense para atacar en lo más profundo de Rusia.
El presidente ruso Vladimir Putin no asistió a la cumbre, y Moscú está representado por el ministro de Asuntos Exteriores Sergey Lavrov.
Nuevas prioridades de la casa blanca
Mientras que el presidente estadounidense, Joe Biden, llega a la cumbre a dos meses de abandonar la Casa Blanca, Xi es un actor central en una reunión agitada por la tensión geopolítica creada por las guerras en Gaza y Ucrania.
El mandatario dijo que China apoyaría el desarrollo global con ocho medidas, entre ellas la construcción de una Iniciativa de la Franja y la Ruta "de alta calidad", informó la televisión estatal china CCTV.
Brasil hasta ahora no se ha unido a la iniciativa global de infraestructuras, pero hay muchas esperanzas puestas en otras asociaciones industriales cuando Xi concluya su estancia en el país con una visita de Estado a Brasilia el miércoles.
Las autoridades brasileñas reconocieron que su agenda para el G20, centrada en el desarrollo sostenible, la aplicación de impuestos a los súper ricos y la lucha contra la pobreza y el hambre, pronto podría perder fuerza cuando Trump comience a dictar nuevas prioridades globales desde la Casa Blanca.
El impulso de Brasil a la reforma de la gobernanza mundial, incluidas las instituciones financieras multilaterales, también puede toparse con obstáculos con Trump, según funcionarios brasileños.
Biden, que visitó la selva amazónica de camino a Río, anunció en una sesión cerrada una contribución estadounidense de 4.000 millones de dólares al fondo de la Asociación Internacional de Fomento (AIF) del Banco Mundial para los países más pobres del mundo, dijeron el lunes dos fuentes conocedoras del compromiso.
Las conversaciones comerciales en torno al G20 se verán avivadas por la preocupación de una escalada en la guerra comercial entre Estados Unidos y China, ya que Trump planea imponer aranceles a las importaciones de China y otros países.
El brío de Trump en la reducción de impuestos se sumará a las dificultades para debatir la propuesta de Brasil de un impuesto a los superricos, un tema muy querido por Lula, que lo incluyó en la agenda del G20.
El nuevo aliado de Trump en América Latina, el libertario presidente Javier Milei, ya ha trazado una línea roja en este asunto. Los negociadores argentinos se negaron a aprobar la mención del tema en el comunicado conjunto de la cumbre, dijeron diplomáticos. (Informes de Lisandra Paraguassu, Andreas Rinke, Eduardo Baptista, Jarret Renshaw y Elizabeth Pineau en Río de Janeiro, y Anthony Boadle en Brasilia. Editado en español por Juana Casas y Javier Leira)