Eeuu acusa a un ciudadano ruso de la campaña de injerencia electoral
WASHINGTON, 29 jul (Reuters) - El Departamento de Justicia de Estados Unidos dijo el viernes que ha acusado a un hombre ruso de orquestar y usar durante varios años grupos políticos en Florida, Georgia y California para sembrar la discordia, difundir propaganda rusa o interferir en las elecciones estadounidenses.
Aleksandr Viktorovich Ionov, residente en Moscú, fue acusado de conspirar para que ciudadanos estadounidenses actuaran como agentes ilegales del Gobierno ruso, según un comunicado del departamento. Si es declarado culpable, se enfrenta a hasta cinco años de prisión.
El departamento dijo que Ionov, actuando en nombre de la agencia de inteligencia rusa FSB, apoyó financieramente a los grupos, les ordenó publicar propaganda prorrusa y coordinó acciones destinadas a promover los intereses rusos.
El departamento también dijo que Ionov usó su control sobre un grupo político estadounidense en Florida para interferir en elecciones locales, apoyando campañas políticas en San Petersburgo, en Florida, de dos personas en 2017 y 2019. Se refirió al grupo y a los individuos como "conspiradores no acusados", pero no los mencionó.
Desde al menos diciembre de 2014 hasta marzo de 2022, dijo el departamento, Ionov, con al menos tres funcionarios rusos, participó en una campaña de influencia extranjera maliciosa contra Estados Unidos.
Además, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso el viernes sanciones a Ionov, a la rusa Natalya Valeryevna Burlinova y a cuatro entidades rusas a las que acusó de apoyar las operaciones de interferencia electoral del Kremlin en el mundo.
Las entidades mencionadas son el Movimiento Antiglobalización de Rusia (AGMR), Ionov Transkontinental, STOP-Imperialismo y el Centro de Apoyo y Desarrollo de la Diplomacia Creativa de Iniciativa Pública (PICREADI).
La embajada rusa en Washington no respondió inmediatamente a un correo electrónico en el que se pedían comentarios sobre la acusación o las sanciones de Estados Unidos, que bloquean los bienes y los intereses de los acusados en Estados Unidos. (Reporte de Rami Ayyub en Washington y Arshad Mohammed en Saint Paul Editado en español por Javier López de Lérida)