En los andes de bolivia, los vecinos luchan en un combate ritual llamado 'tinku'
Por Santiago Limachi
San pedro de macha, bolivia, 7 mayo (reuters) - en la localidad boliviana de san pedro de macha, ubicada en lo alto de los andes australes, cientos de hombres y mujeres indígenas quechuas salen a las calles para una danza ritual y de combate conocida como 'tinku', que incluye combates cuerpo a cuerpo entre vecinos con el propósito de resolver disputas.
El 'Tinku', palabra que en quechua significa "encuentro" y en el dialecto local aymara "ataque físico", se celebra en ciertos pueblos quechuas en mayo como forma tradicional para resolver problemas, con la idea de no permitir que se agraven.
"Esta costumbre es muy antigua. Se transmitió a mi padre y mi padre me lo dejó", dijo José Luis Paco Cruz, de 35 años, un bailarín de 'Tinku' que viajó cientos de kilómetros hasta el pueblo con sus dos hijos, Luis Eduardo, de 17 años, y Brayan, de 10.
"Ahora se lo dejo a mis hijos para que la costumbre nunca desaparezca. Esto es parte de la herencia que dejo a mis hijos", señaló.
Los enfrentamientos incluyen trajes coloridos y un casco llamado 'montera' hecho de cuero que emula el casco de los conquistadores españoles.
Las batallas están destinadas a mostrar la devoción de la gente a la Madre Tierra, y en ocasiones dejar una ofrenda de sangre en la pelea.
En el pueblo, la tradición del 'Tinku' abarca desde alegres bailes y música antes y durante la pelea. A veces la policía se ve involucrada, como árbitro, para detener los excesos en los enfrentamientos.
Al margen, algunos vecinos ayudan a tratar los labios y las caras sangrantes de los luchadores.
Esteban Paco Taquichiri, abuelo de José Luis, admitió que a veces ha habido muertes, aunque ahora la policía monitorea los hechos y utiliza gases lacrimógenos para dispersar a los muy violentos.
"Entramos a la plaza bailando por todos los rincones para enfrentarnos unos a otros", dijo Taquichiri. "Por mala suerte, a veces uno o dos personas caen al suelo y, con peor suerte aún, incluso mueren. Pero todo esto forma parte de nuestras costumbres", agregó. (Reporte de Santiago Limachi y Mónica Machicao; Escrito por Adam Jordam; Traducido por Walter Bianchi; Editado por Jorge Otaola)