Europa debe cancelar prohibición a motores de gasolina para reducir dependencia de china: ceo de bmw
PARÍS, 15 oct (Reuters) - Europa debe cancelar su plan de prohibir la fabricación de nuevos vehículos con motores que funcionen a base de combustibles fósiles a partir de 2035, para así reducir la dependencia de la cadena de suministro de baterías de China y aprovechar sus ventajas tecnológicas, afirmó el martes el presidente ejecutivo de BMW.
Oliver Zipse, que lleva tiempo presionando para que los reguladores permitan diversas tecnologías -incluidos combustibles alternativos como los electrocombustibles o los biocombustibles y los coches de celda de combustible de hidrógeno-, dijo que el estado de ánimo en Europa estaba "tendiendo hacia el pesimismo" y que la región necesitaba un nuevo marco regulador para seguir siendo competitiva.
"Una corrección del objetivo del 100% de vehículos eléctricos de batería para 2035 como parte de un paquete global de reducción de CO2 también permitiría a los fabricantes de equipos originales europeos depender menos de China para las baterías", dijo Zipse en el Salón del Automóvil de París.
"Para mantener el rumbo hacia el éxito, es esencial una trayectoria estrictamente agnóstica desde el punto de vista tecnológico dentro del marco político", agregó.
En marzo de 2023, los países de la UE aprobaron una ley histórica que exigiría que todos los vehículos nuevos tuvieran cero emisiones de CO2 a partir de 2035, prohibiendo de hecho los vehículos diésel y de gasolina, y un 55% menos de emisiones de CO2 a partir de 2030, en comparación con los niveles de 2021.
Automotrices como BMW, VW y Renault, así como el Gobierno italiano, han pedido que se relajen o retrasen los objetivos de CO2, temiendo el impacto de fuertes multas debido a ventas de vehículos eléctricos inferiores a las esperadas.
Sin embargo, Alemania ha rechazado una revisión anticipada de los objetivos, dada la necesidad de claridad para la industria y la urgencia de hacer frente al cambio climático.
También en París, el presidente de la Asociación Francesa del Automóvil (PFA) no llegó a pedir la abolición de la prohibición de 2035, pero afirmó que era necesario "volver a sentarse a la mesa" para debatir la revisión de los objetivos, prevista actualmente para 2026.
(Reporte de Victoria Waldersee, Gilles Gillaume en París; Editado en Español por Ricardo Figueroa)