Indignación en Brasil por ataques racistas a juveniles Palmeiras en Paraguay
LA NACION
Las ofensas racistas lanzadas contra jugadores juveniles del Palmeiras en Asunción causaron indignación en Brasil y llevaron al club brasileño a pedir este viernes que Cerro Porteño sea expulsado de la Copa Libertadores Sub-20.
El capitán del 'Verdao' Sub-20, Luighi, rompió en llanto tras el juego del jueves, en el que su equipo derrotó al 'Ciclón' paraguayo por 3-0.
"¿Hasta cuándo va a pasar esto? (...) Lo que hicieron conmigo fue un delito", reclamó entre lágrimas el atacante de 18 años en sus declaraciones pospartido, retomadas ampliamente este viernes por medios brasileños.
"¿Qué va a hacer la Conmebol al respecto?", interrogó el jugador.
Imágenes de televisión muestran a un aficionado de Cerro Porteño imitando a un mono en dirección a varios jugadores de Palmeiras que salían del campo tras ser sustituidos en la recta final del encuentro.
"Vamos a solicitar la exclusión de Cerro Porteño de la competición, porque no es la primera vez que ese club ataca a nuestros atletas y aficionados", dijo a medios la presidenta de Palmeiras, Leila Pereira, citando incidentes similares en 2022 y 2023.
"¡Basta! El Palmeiras no va a soportar más cualquier tipo de delito contra nuestros atletas (...) Vamos a tomar medidas drásticas", enfatizó Pereira.
La dirigente acusó a la Conmebol, ente rector del fútbol sudamericano, de ser "muy displicente" ante esta denuncia.
"Intenté hablar con el presidente de la Conmebol y no lo conseguí. Me pareció muy desagradable porque fue un hecho grave".
"Si no lo resolvemos en la Conmebol, los resolveremos en la FIFA", adelantó Pereira, quien elogió "la actitud corajuda" de Luighi.
- Solidaridad -
El astro brasileño del Real Madrid Vinicius Jr también respaldó al juvenil y se sumó a las críticas a la Conmebol.
"Ustedes nunca hacen nada. NUNCA!!!!", escribió Vini en una historia de Instagram dirigida a la entidad.
El delantero del Real Madrid se convirtió en un símbolo de la lucha contra el racismo tras ser víctima de varios episodios ofensivos en el campo, uno de los cuales terminó en una condena histórica a ocho meses de prisión contra tres hinchas del Valencia.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, mostró también su apoyo el viernes a Luighi y pidió detener el "odio disfrazado de rivalidad".
"Racismo significa el fracaso de la humanidad", escribió Lula en X. "El mundo no puede tolerar más este tipo de violencia".
- "Medidas disciplinarias" -
Sin aludir directamente al caso, la Conmebol rechazó "tajantemente cualquier acto de racismo" en un mensaje de X y anticipó "las correspondientes medidas disciplinarias", además de posibles "acciones adicionales".
Cerro Porteño, por su parte, manifestó en un comunicado "total repudio a todo tipo de hechos de racismo".
"Evitemos caer en provocaciones que puedan derivar en este tipo de conductas", agregó el club paraguayo.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) calificó la escena del jueves como "chocante" y pidió al presidente de la Conmebol, el paraguayo Alejandro Domínguez, un castigo con "rigor" para Cerro.
Brasil es el país con más población negra fuera de África y los insultos racistas contra sus jugadores y aficionados han sido repetidos en varios países.
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