Mercados globales-las apuestas por la fed apuntalan las bolsas asiáticas y debilitan el dólar
Por Wayne Cole
SÍDNEY, 19 ago (Reuters) - Las bolsas asiáticas subían y el dólar bajaba el lunes, después de que la renta variable mundial disfrutara de su mejor semana en nueve meses ante las expectativas de que la economía estadounidense esquivara una recesión y de que el enfriamiento de la inflación iniciara un ciclo de recortes de los tipos de interés.
La perspectiva de una reducción de los costes de financiación hacía que el oro superara por primera vez los 2.500 dólares la onza y que el dólar cayera frente al euro, mientras que el yen avanzaba repentinamente, lo que lastraba al Nikkei.
Los miembros de la Reserva Federal Mary Daly y Austan Goolsbee señalaron durante el fin de semana la posibilidad de una flexibilización en septiembre, mientras que las minutas de la última reunión de política monetaria, que se conocerán esta semana, deberían subrayar las perspectivas moderadas.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, hablará en Jackson Hole el viernes y los inversores dan por hecho que reconocerá los argumentos a favor de un recorte.
"Aunque puede ser demasiado pronto para declarar la victoria —y los banqueros centrales serán ciertamente prudentes para evitarlo en su retórica oficial—, el miedo a la inflación que había dominado el debate en la política monetaria desde que los precios comenzaron a dispararse durante la pandemia se ha desvanecido en gran medida", dijo el economista de Barclays Christian Keller.
"Puede que la inflación aún no haya alcanzado el objetivo del 2%, pero está cerca y va en la dirección correcta".
Los futuros prevén un movimiento de un cuarto de punto, con una probabilidad del 25% de 50 puntos básicos, que dependerá en gran medida del próximo informe de nóminas.
Los analistas de Goldman Sachs advirtieron que el miércoles se publicarán las revisiones anuales de referencia de las series de empleo, que podrían dar lugar a una importante revisión a la baja de entre 600.000 y un millón de puestos, aunque esto probablemente exageraría la debilidad del mercado laboral.
Por el momento, las expectativas de un aterrizaje más suave para la economía estadounidense hacían que los futuros del S&P 500 suban un 0,2% y los futuros del Nasdaq avancen un 0,3%, además de las ganancias de la semana pasada.
Los futuros del EUROSTOXX 50 sumaban un 0,2% y los del FTSE cedían un 0,1%.
El índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico, que no incluye Japón, ganaba un 1,0%, tras subir un 2,8% la semana pasada.
El Nikkei japonés perdía un 1,2% tras la subida del yen, aunque la semana pasada se recuperaba casi un 9%. Los valores chinos subían un 0,4%.
La Reserva Federal no es la única que contempla una política más laxa, ya que se espera que el banco central sueco recorte los tipos esta semana, posiblemente en 50 puntos básicos.
En los mercados de divisas, el dólar retrocedía un 1%, hasta 146,20 yenes, y se alejaba del máximo de 149,40 alcanzado la semana pasada. El euro avanzaba hasta 1,1030 dólares, justo por debajo del máximo de la semana pasada de 1,1047 dólares.
Según Jonas Goltermann, economista jefe adjunto de mercados de Capital Economics, "es probable que el mensaje general de la Reserva Federal de esta semana tranquilice a los agentes del mercado que buscan una confirmación de que los recortes de los tipos de interés son ya inminentes".
"Por lo tanto, el billete verde puede seguir bajo presión a corto plazo, aunque dado el grado en que la relajación de la Fed ya está descontada, dudamos que haya mucha más debilidad del dólar en el futuro".
La debilidad del dólar, unida a la bajada de los rendimientos de los bonos, ayudaba al oro a mantenerse en los 2.500 dólares la onza, cerca de su máximo histórico de 2.509,69 dólares.
Los precios del petróleo volvían a caer, mientras la preocupación por la demanda china seguía pesando en el ánimo de los inversores.
El Brent caía 11 centavos, a 79,57 dólares por barril, mientras que el crudo estadounidense perdía 20 centavos, a 76,45 dólares por barril.
(Información de Wayne Cole; edición de Christopher Cushing; editado en español por Mireia Merino)