ONU pide responsabilidad por "horrible" matanza de palestinos Cisjordania: "El último no fue caso aislado"
La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) ha exigido este viernes responsabilidades por la "horrible" matanza de civiles palestinos en Cisjordania y ha denunciado que el ataque del jueves en la localidad de Jit "no ha sido un caso aislado".
"Llevamos años denunciando que los colonos atacan impunemente a las comunidades palestinas en sus tierras de Cisjordania, y éste es realmente el porqué de la cuestión: la impunidad de la que gozan los autores de tales actos", ha lamentado el portavoz de la oficina, Ravina Shamdasani, en un comunicado.
La realidad que viven los palestinos en Cisjordania, ha agregado Shamdasani, no es sino "consecuencia directa" de la política de ocupación de Israel, que ha traído consigo "años de violencia dirigida contra comunidades palestinas por parte de colonos israelíes".
"Está claro que hay que poner fin a esta situación, y para ello es fundamental que los responsables rindan cuentas", ha insistido, criticando que "ha habido muy pocas investigaciones" y que, cuando las hay, "en la mayoría de ocasiones no concluyen con justicia para las víctimas ni para los autores".
"Hay informes que indican que las fuerzas de seguridad israelíes se mantienen al margen de los ataques. Incluso hay informes de distribución de armas a los colonos. Por tanto, está claro que hay una responsabilidad del Estado en este sentido", ha apostillado el portavoz.
Desde el pasado 7 de octubre, al menos 609 palestinos han muerto en Cisjordania, incluidos 146 niños, ocho mujeres y al menos cuatro personas con discapacidad, según los últimos datos de ACNUDH.
Las declaraciones de Shamdasani hacen referencia al ataque denunciado por el Ministerio de Salud de la Autoridad Palestina este jueves, cuando un joven de 23 años murió durante un violento ataque por parte de un grupo de colonos en la aldea de Jit, al este de la ciudad cisjordana de Qalqilya.
El joven, identificado como Rashid Mahmud Abdelqader Sadda, fue herido en el pecho por balas y trasladado a un hospital de Nablús, en el norte de Cisjordania, donde los médicos certificaron su muerte, según la agencia de noticias WAFA.
La propia ONU, Francia, Reino Unido, Alemania y Estados Unidos han manifestado también su repulsa a este ataque, obra de "criminales" en palabras del embajador norteamericano en Israel, Jack Lew, que se ha mostrado "consternado".