Resumen 2-hezbolá dice que causará sufrimiento a israel, pero insta a un cese del fuego
(Actualiza con comentarios de líder de Hezbolá, agrega citas y detalles; cambia redacción)
Por Emma Farge y Laila Bassam
GINEBRA/BEIRUT, 15 oct (Reuters) - El vicejefe de Hezbolá, Naim Qassem, afirmó el martes que el grupo respaldado por Irán infligiría "dolor" a Israel, pero también pidió un alto el fuego en el conflicto que enfrenta a los dos bandos en el sur de Líbano.
Israel ha estado aumentando la presión sobre Hezbolá desde que comenzó sus incursiones en la región tras matar a líderes y comandantes de Hezbolá, incluido su veterano secretario general Hassan Nasralá el mes pasado, en el mayor golpe al grupo en décadas.
"La solución es un alto el fuego, no estamos hablando desde una posición de debilidad, si los israelíes no quieren eso, continuaremos", dijo Qassem en un discurso grabado. "Pero después del alto el fuego, según un acuerdo indirecto, los colonos volverían al norte y se trazarán otras medidas".
No hubo comentarios inmediatos por parte de Israel, que afirma que su operación en Líbano tiene como objetivo garantizar el regreso de decenas de miles de residentes obligados a huir de sus hogares en el norte de su territorio debido a los ataques de Hezbolá.
Qassem dijo que Hezbolá se reservaba el derecho a atacar en cualquier lugar de Israel porque su enemigo ha hecho lo mismo en Líbano. Afirmó que más israelíes se verán desplazados y "cientos de miles, incluso más de dos millones, estarán en peligro en cualquier momento, a cualquier hora, cualquier día".
"Nos centraremos en atacar a los militares israelíes y sus centros y cuarteles", remarcó.
El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó el lunes que Israel seguiría atacando a Hezbolá "sin piedad, en todo Líbano, incluida Beirut".
Israel, que inició sus incursiones en el sur del Líbano hace dos semanas para combatir al grupo miliciano Hezbolá, respaldado por Irán, ha emitido órdenes de evacuación militar que afectan a más de una cuarta parte del país, dijo el martes la agencia de la ONU para los refugiados.
Las cifras subrayan el alto precio que están pagando los libaneses mientras Israel intensifica su campaña para derrotar a Hezbolá y destruir su infraestructura en un conflicto que dura ya un año.
La directora de la Agencia de la ONU para los Refugiados en Oriente Medio, Rema Jamous Imseis, dijo en una rueda de prensa en Ginebra que las nuevas órdenes de evacuación israelíes a 20 pueblos del sur del Líbano significaban que más de una cuarta parte del país estaba ahora afectada.
"La gente está haciendo caso a estas llamadas a evacuar y huyen casi sin nada".
Los ataques israelíes han causado la muerte de al menos 2.309 personas en el último año, según el Gobierno libanés, y han desplazado a más de 1,2 millones de personas.
La mayoría ha muerto desde finales de septiembre, cuando Israel amplió su campaña militar. La cifra no distingue entre civiles y combatientes. Alrededor de 50 israelíes, tanto soldados como civiles, han muerto, según el Estado judío.
Cada vez más ataques
Israel amplió su campaña de bombardeos en Líbano el lunes, matando al menos a 22 personas —la mayoría mujeres— en un ataque aéreo en el norte contra una casa en la que personas desplazadas buscaban refugio de los ataques israelíes más al sur, dijeron responsables de salud.
"Lo que estamos escuchando es que entre las 22 personas muertas había 12 mujeres y dos niños", dijo el portavoz de la oficina de derechos humanos de la ONU, Jeremy Laurence, en la misma rueda de prensa en respuesta a una pregunta sobre el ataque en la localidad libanesa de Aitu, de mayoría cristiana.
Los equipos de rescate seguían sacando cadáveres de los escombros en Aitu el martes, según medios locales, tras uno de los ataques más mortíferos contra familias desplazadas en Líbano, después de la incursión de principios de este mes contra la localidad de Ain Deleb, en el sur de Líbano, que dejó más de 30 muertos.
Israel no ha hecho comentarios sobre el ataque de Aitu, pero ha dicho en repetidas ocasiones que toma todas las precauciones posibles para evitar víctimas civiles.
Hasta ahora, las operaciones militares de Israel en Líbano se han centrado principalmente en el valle de Bekaa, en el este, en los suburbios de Beirut y en el sur, donde las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU han dicho que el fuego israelí ha alcanzado sus bases en numerosas ocasiones.
Oriente Medio sigue en alerta máxima ante la posibilidad de que Israel tome represalias contra Irán por una andanada de misiles lanzada el 1 de octubre en respuesta a los ataques contra Líbano.
La oficina de Netanyahu dijo que Israel escucharía a Estados Unidos, pero decidiría sus acciones según su propio interés nacional.
La declaración iba acompañada de un artículo de The Washington Post en el que se afirmaba que Netanyahu había comunicado al Gobierno de Joe Biden que Israel atacaría objetivos militares iraníes, no nucleares ni petrolíferos, lo que sugería un contraataque más limitado destinado a evitar una guerra a gran escala. (Reporte adicional de Emma Farge en Ginebra, Clauda Tanios en Dubái, Abdelaziz Boumzar en Masnaa, Amina Ismail en Beirut, Adam Makary en El Cairo y Michelle Nichols en Nueva York; Escrito por Michael Georgy; Editado en español por Benjamín Mejías Valencia y Javier Leira)