Starmer promete más reformas procrecimiento tras impacto del presupuesto británico en los mercados
Por William Schomberg
LONDRES, 2 nov (Reuters) - El primer ministro británico, Keir Starmer, prometió reformas para acelerar la economía y sanear el sector público, después de que el primer presupuesto del gobierno laborista no lograra impulsar las perspectivas de crecimiento y provocara una caída en picado de los precios de la deuda pública durante dos días.
La ministra de Finanzas, Rachel Reeves, anunció el miércoles un plan que incluye grandes alzas de impuestos, préstamos y gastos, pero la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR, por sus siglas en inglés), el organismo británico de control presupuestario, consideró que el crecimiento económico más allá del próximo año será más débil de lo que pensaba.
Los precios de la deuda pública británica cayeron en las horas posteriores a su discurso y de nuevo el jueves, lo que provocó una fuerte subida de los costos de endeudamiento, antes de estabilizarse el viernes.
En un artículo publicado el sábado en el Financial Times, Starmer afirmó que el presupuesto es un "primer paso en nuestra misión de crecimiento", pero que también abre el camino a la reforma de "nuestro chirriante Estado central" y sus servicios públicos, así como a una mayor inversión del sector privado.
"Al igual que no podemos conseguir la prosperidad a base de impuestos y gastos, tampoco podemos mejorar los servicios públicos a base de gastos", escribió, refiriéndose a la preocupación por que el sistema sanitario y otros servicios necesiten algo más que dinero extra para mejorar.
Algunos analistas han afirmado que, sin reformas, el gobierno podría tener que volver a subir los impuestos en el futuro para arreglar el sector público, pese a la promesa de Reeves de que su presupuesto pretende "hacer borrón y cuenta nueva".
Starmer enumeró los planes para cumplir su promesa a los votantes en las elecciones de julio de duplicar el ritmo de crecimiento económico de Reino Unido, como objetivos en materia de vivienda, reformas del sistema de planificación, aprobación más rápida de proyectos de energía limpia y una revisión del funcionamiento de los reguladores.
"Este proceso implica un trabajo detallado, a menudo minucioso. Por esa razón, aún no está listo para ser incluido en las previsiones de crecimiento de la OBR", en cuyos cálculos se basa el presupuesto. "Sin embargo, debemos ser optimistas sobre el potencial", escribió Starmer, centrándose en la importancia de la inversión del sector privado junto a un gran aumento del gasto público en infraestructuras.
(Editado en español por Carlos Serrano)