Ucranianos asisten inquietos a conversaciones de paz mientras línea de frente se acerca a sus hogares

Por Vitalii Hnidyi y Valentyn Ogirenko

NOVOPAVLIVKA, Ucrania, 19 feb (Reuters) - Junto a una planta de molienda bombardeada en su pueblo, Mykola Havrylov dijo que se sentía impotente al ver a funcionarios estadounidenses y rusos discutir el fin de una guerra de tres años que se acerca cada vez más a su hogar en el sureste de Ucrania.

Los combates entre las tropas rusas y ucranianas se encuentran ahora a sólo 13 kilómetros de Novopavlivka, un pueblo de la región de Dnipropetrovsk, donde residentes como Havrylov expresaron su preocupación por la exclusión de Ucrania de las conversaciones entre Estados Unidos y Rusia esta semana.

Aunque la mayoría de las personas que viven cerca de la línea del frente quieren que la guerra termine, también temen que cualquier acuerdo entre Estados Unidos y Rusia pueda obligar a Ucrania a hacer dolorosas concesiones territoriales y dejarlos vulnerables a los continuos avances rusos.

"Es una tendencia muy, muy negativa, pero no tengo influencia sobre ella", dijo Havrylov, antiguo jefe del pueblo en Novopavlivka.

Mientras la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, busca un final rápido a la invasión de Moscú sin incluir a Kiev en la mesa, el presidente Volodímir Zelenski ha dicho que las conversaciones sobre cómo poner fin a la guerra no podrían celebrarse a espaldas de Ucrania.

La Casa Blanca dijo el martes que mantendría más conversaciones con Rusia tras una reunión inicial en Arabia Saudita, lo que supone un cambio respecto al planteamiento anterior de Washington, que movilizó a los aliados de Estados Unidos para aislar al presidente ruso, Vladimir Putin.

Kiev ha exigido sólidas garantías de seguridad, como la promesa de tropas de paz occidentales, y Zelenski ha dicho en repetidas ocasiones que Rusia no está interesada en la paz y que simplemente quiere un alto el fuego para reconstruir sus fuerzas e invadir de nuevo.

LAS TROPAS RUSAS SE ACERCAN

En el campo de batalla, las tropas ucranianas, superadas en número de efectivos y armamento, luchan por contener una marcha rusa cada vez más intensa a través de la región industrial de Donbás.

Las fuerzas de Moscú se están acercando a la región de Dnipropetrovsk, considerada como un amortiguador entre el este devastado por la guerra y el corazón central de Ucrania.

Los ataques aéreos rusos sobre Novopavlivka se han hecho más frecuentes desde principios de año, según han declarado los residentes a Reuters.

Las casas con cicatrices de bombas se alinean en calles antaño tranquilas que ahora sirven de rutas clave para los vehículos blindados ucranianos. Los helicópteros zumban a baja altura y se oye un estruendo constante de explosiones y fuego de ametralladoras pesadas.

"Es doloroso ver esto, y doloroso darse cuenta de que el frente está ahora cerca", dijo el director de la escuela, Yurii Bilyk, señalando los escombros de su edificio escolar gravemente dañado.

Los funcionarios europeos también se han visto sorprendidos por las medidas de la administración Trump en Ucrania.

En una reunión de emergencia celebrada el lunes en París, pidieron un mayor gasto en defensa, pero se mostraron divididos sobre la idea de desplegar fuerzas de paz en Ucrania.

Havrylov dijo que estaba consternado de que los socios occidentales de Ucrania no hubieran proporcionado un apoyo militar y diplomático más urgente a medida que los rusos se acercaban.

"No lo entiendo, y creo que no soy el único", afirmó. (Redacción: Dan Peleschuk; Edición de Helen Popper; Edición en español de Daniela Desantis)

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