Paradojas de los conductores

La responsabilidad individual. Esa es la cuestión final en materia de seguridad vial. Es cierto que hoy hay más y mejores campañas de concientización, pero hay un componente psíquico y social que parece impedir a una gran cantidad de conductores asumir la responsabilidad que implica conducir un vehículo. En tanto, los controles parecen insuficientes o poco disuasivos.

Un estudio realizado por la consultora TrialPanel refleja con números ambas situaciones. En la encuesta, el 86% de los conductores admitió usar el celular mientras maneja; el 74% que excede las velocidades máximas; el 65% que estaciona mal; un 60% acepta haber conducido alcoholizado; 56% haber cruzado semáforos en rojo, y un 50% no utilizar el cinturón de seguridad, entre las infracciones más comunes y peligrosas.

¿Y las multas? El 32% de los encuestados fue multado por mal estacionamiento, 23% por exceso de velocidad, 17% por usar el celular, 11% por conducir sin el cinturón de seguridad y 10% por cruzar un semáforo en rojo. Como se observa, una gran disparidad entre los porcentajes de una determinada infracción y la sanción correspondiente.

Otro factor en esta problemática es la escasa autocrítica, que expresa un informe de la Cecaitra de 2018: "Las respuestas de los encuestados reflejan que entre los argentinos hay poco o escaso respeto por las normas de tránsito, pero ese mismo comportamiento no aparece cuando se responde sobre el apego a las normas en forma personal: tiende a haber una relación inversamente proporcional en esta percepción. Paradójicamente, la idea de que la falta de respeto a las normas de tránsito caracteriza a los argentinos, no coincide con el respeto a las normas que dice tener la mayoría de los encuestados".