Aún hay un bombero grave
Tres bomberos que fueron parte del operativo para controlar el incendio en Barracas el miércoles pasado continuaban ayer internados. Uno de ellos, Facundo Ambrosi, se encuentra en estado grave , en coma inducido, aunque estable. El cuerpo médico que lo atiende aguardará la evolución en las próximas horas para determinar si es sometido a una nueva intervención quirúrgica.
Ambrosi, de 25 años, pertenece al cuerpo de bomberos voluntarios del cuartel Vuelta de Rocha, donde también se desempeñaba Sebastián Campos, uno de los fallecidos en el trágico hecho.
Ambrosi está internado en la terapia intensiva del hospital Argerich, donde se recupera de múltiples fracturas.
Los otros dos heridos son efectivos de la Policía Federal y están internados en el hospital Churruca. La información en relación al estado de salud de ambos es escasa ya que ayer no hubo parte médico oficial.
"Facundo sigue estable, pero en estado crítico. Está bien de la parte renal, ya puede orinar por su cuenta, pero continúa con asistencia respiratoria mecánica. Tenemos que esperar la evolución de las próximas 48 horas", detalló a LA NACION su hermano, Rodrigo Ambrosi, bombero voluntario del cuartel de La Boca.
El joven herido se encontraba con los bomberos y rescatistas que quedaron atrapados debajo de los escombros cuando ocurrió el primer derrumbe. Sufrió fractura de fémur, tibia y peroné de la pierna izquierda; tibia y peroné de la pierna derecha; cadera derecha y múltiples fracturas en el brazo derecho. "De acuerdo a su evolución lo operarían de la cadera a más tardar el lunes. Acá está bien atendido por los médicos. Nos ofrecieron trasladarlo, pero no quisimos para que su estado no empeore", amplió su hermano.
Facundo tiene tres hijos: Abel, de 6 años; Thiana, de un año, y Gael, recién nacido.
La vocación de bombero voluntario lo acompaña trabajando en comedores y museos de la ciudad.
El cuartel de bomberos es como su segunda casa ya que, al igual que su hermano, su padre fue jefe de bomberos en Vuelta de Rocha. "En el hospital siempre está acompañado por mi mamá o el resto de la familia. También lo fueron a saludar muchos compañeros y hasta bomberos desconocidos de Entre Ríos, la Policía Federal, La Boca y San Telmo", contó Rodrigo.
El miércoles la familia había solicitado dadores de sangre (Cero Positivo) y el pedido superó las expectativas. Eran necesarias quince personas y se acercaron 50. Pero todavía se necesitan más dadores de sangre por lo que el pedido sigue vigente. Quienes deseen colaborar pueden acercarse al sector de hemoterapia del Argerich o al segundo piso del hospital donde se encuentra Ambrosi (segundo piso, terapia intensiva B, cama 2083). "Él nos escucha, sabemos que nos escucha. Le hablamos, no responde, pero lo alentamos. Del accidente no sabe nada, cuando despierte se lo diremos de a poco", reveló su hermano.