Belgrano: cayó un árbol y destrozó tres autos
Un enorme árbol cayó esta mañana en la calle Zabala al 2200, en el barrio de Belgrano. Por el impacto hubo un solo herido leve que no quiso recibir atención médica, pero quedaron destruidos tres autos que estaban estacionados en la calle y cuyos dueños no habían aparecido aún.
La caída se produjo a las 11.30 de la mañana en una zona concurrida y rodeada de colegios. El más cercano, el Master College, está a apenas media cuadra.
"Por suerte sucedió en un horario en el que no entran ni salen chicos de la escuela" dijo María Esther Antelo, una vecina de la calle Zabala, que miraba los acontecimientos desde su balcón. "Se me vino la naturaleza encima", agregó mientras los operarios del Servicio de Emergencias de la Ciudad cortaban con motosierras las enormes ramas del árbol caído.
"Escuchamos la explosión y salimos corriendo para ver si había alguien abajo", contó Gabriel Dirisio, encargado del local de Nucha, que queda justo en la esquina de Zabala y O´Higgins. Las ramas cayeron sobre las mesas que la confitería tiene en la vereda. El árbol, comentó, estaba muy inclinado (al igual que otro que permanece de la mano de enfrente). También había mucho viento.
Para Luis Castellone, vecino de la zona, se trató de una "desgracia con suerte", porque de haber sido un día caluroso las mesas de la vereda hubieran estado repletas.
"Hubo una ráfaga fuerte y fue todo en un segundo, justo en ese instante estaban pasando como cinco personas por la esquina", relató Maximiliano Gabriel Gallo, encargado del edificio de O´higgins 1414 que también presenció la caída. Según detalló, justo en ese momento circulaban a metros de ahí una señora con un cochecito, un señor que llevaba un tarro de pintura, y un hombre con una niña, que resultó herido. "Se quedaron todos duros y yo corrí para ver si había heridos", contó.
"Al padre le pegó la rama en la cabeza. La nena se tiró al suelo del susto, su mochila salió volando y después no la encontraban", dijo. Según contó Gallo, el hombre herido no quiso recibir atención médica y se retiró poco tiempo después, cuando la Policía ya había llegado.
Desde la Dirección General de Espacios Verdes y Arbolado Público informaron que el ejemplar era un jacarandá de 23 metros de altura que se encontraba en buen estado fitosanitario y había sido podado en el 2018. Una inspección del árbol realizada hoy detectó que en sus raíces tenía cortes mecánicos en sentido contrario a la caída, probablemente realizados por una empresa que hizo zanjeos en la zona.
Esto, sumado a las fuertes ráfagas de viento explicaría la caída. "Se concluye que al encontrarse el ejemplar en una zona despejada sin árboles en su entorno inmediato se encontraba expuesto a los fuertes vientos y sumado a los cortes de raices que presentaba, se desestabilizó , produciendose la caída del mismo en forma paralela a la vereda", dice el informe.
Cerca del mediodía continuaban trabajando operarios del Servicio de Emergencias de la Ciudad, que cortaban con sierras las ramas del árbol para poder retirarlo. Una de ellas había atravesado por completo el parabrisas de uno de los vehículos estacionados.
La Policía de la Ciudad estimó que cerca de las 15 horas se liberaría el tránsito en la zona