Cierran la barrera de la avenida Balbín para construir un viaducto
El viaducto de la avenida Balbín que cruzará las vías del ferrocarril Mitre a la altura del barrio de Saavedra ya no se discute. El gobierno porteño anunció que mañana se cerrará el paso a nivel existente para empezar a construir el túnel que llevará el tránsito por debajo del tren. El proyecto es cuestionado por comerciantes de la zona, que dicen que perjudicará sus ventas, y por vecinos, que temen que la obra provoque inundaciones. Otros residentes, en cambio, ven una transformación favorable para la circulación de peatones y de los automóviles.
Anteayer, un empleado del gobierno de la ciudad tocó a la puerta de la casa de Enrique Bacigalupe, que vive en la zona. Era para ponerlo al tanto de que mañana se inician los trabajos para abrir el túnel que cruzará bajo las vías. El viaducto, de 5,10 metros de alto, se extenderá sobre Balbín entre Estomba y la avenida Goyeneche. Contará con cuatro carriles de circulación (dos por sentido); a ambos lados, en las calles para los frentistas, se realizará la puesta en valor del espacio público.
"Me dijeron que en 14 meses estará terminado. Sé que hace falta cierto reordenamiento del tránsito, sobre todo por lo que ocurre en horarios pico, pero lo que más nos preocupa como vecinos es que el túnel provoque inundaciones. Las bombas pueden fallar, no es un sistema natural de desagüe", reflexionó Bacigalupe en diálogo con LA NACION. Los vecinos aún retienen en su memoria las consecuencias de aquel fatal anegamiento de 2013 como consecuencia del que murieron seis personas en el barrio y que provocó pérdidas materiales.
Desde Autopistas Urbanas (AUSA) explicaron que además de construirse una estación de bombeo dentro del túnel, como en todos los pasos bajo nivel, para el viaducto de Balbín se contempló un sistema de sumideros y conductos en las calles pasantes que captarán el agua antes de que llegue al túnel y la incorporarán al sistema pluvial aguas abajo.
"Estamos prestando especial atención a este tema y vamos a concretar obras hidráulicas para reducir al mínimo los inconvenientes", dijo el ministro de Desarrollo Urbano y Transporte, Franco Moccia.
El comercio, en contra
A lo largo del tramo donde se construirá el viaducto, sobre la avenida Balbín, la mayoría de los comercios tiene un cartel pegado en su vidriera que dice "No al túnel. Están devastando el centro comercial".
Los vendedores denuncian que durante la obra sus locales quedarán invisibilizados y que, una vez inaugurado el paso bajo nivel, ya no estarán ubicados sobre una arteria transitada, como es la avenida, sino que estarán "como escondidos" en una colectora que obligará a algunos de ellos a cerrar las puertas. "No se justifica este proyecto. Era mejor si mejoraban el paso de las vías", dijo Emanuel, empleado de un local. Esta tarde, a las 18.30, habrá una manifestación en contra del proyecto en la estación Saavedra del tren Mitre.
Según dijo a LA NACION otro vecino, José Rodríguez, el viaducto "va a dar mayor seguridad para los peatones", y recordó que "los túneles de Congreso y Monroe quedaron muy bien". Hasta el momento, son 26 los pasos bajo nivel habilitados en la ciudad.
El también vecino Jorge Carril destacó que la obra "es buena" para el tráfico.
Mientras duren los trabajos, algunos colectivos cambiarán su recorrido y ciertas calles quedarán habilitadas para el doble sentido de circulación, por lo que se prohibirá el estacionamiento. "El barrio va a ser un caos", se quejó Marta Guanco.