Inundaciones: no hay solución a corto plazo

LA PLATA.- Las obras de saneamiento de los arroyos que atraviesan el Gran La Plata demandarán, como mínimo, cuatro años.

Tanto el ministro de Infraestructura, Vivienda y Servicios Públicos bonaerense, Alejandro Arlía, como el titular de la Dirección Provincial de Saneamiento y Obras Hidráulicas (Dipsoh), Mario Gschaider, estimaron ante legisladores y concejales -al exponer ante sendas comisiones investigadoras por la inundación del 2 de abril- que las tareas estructurales, que incluyen la relocalización de entre 600 y 700 familias asentadas irregularmente en los márgenes del arroyo Del Gato, demandaran "por lo menos cuatro años".

Ambos funcionarios aclararon que el plazo podría reducirse al plantear la obra por etapas simultáneas, pero que esto "dependerá del flujo de fondos". Una alta fuente del gobierno provincial reconoció ayer que, "aún con todo a favor, sería muy difícil que demoremos menos de tres años".

Días atrás, el titular de la Autoridad del Agua (ADA) de la provincia, Daniel Coroli, consideró que "los intendentes no tuvieron como prioridad el tema hídrico", al intentar explicar por qué las obras no se realizaron pese a que ya se contaba con el proyecto y presupuesto listos para ser licitado desde 2010.

En tal sentido Gschaider aseguró que desde el inicio del gobierno de Daniel Scioli la comuna platense "nunca gestionó obras de envergadura hidráulica ante la provincia. Y calificó de "artesanal" las tareas de limpieza realizadas sin maquinaria alguna por cooperativas de trabajo conformadas por desocupados.

Lo cierto es que el plan oficial nunca se llegó a transformar en obras pese a que su inicio fue anunciado en tres oportunidades con diversas fuentes de financiamiento. Las obras proyectadas por la consultora ABS surgen del "Estudio de la cuenca del arroyo Del Gato", realizado por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) en enero 2010, incluían la realización de derivadores y readecuaciones de las redes de desagües en el casco urbano de La Plata.

"El objetivo es corregir y ampliar los planes de obras que ayuden a mitigar los efectos y a ampliar la capacidad de los arroyos, además de la relocalización de las personas que viven a la vera de los arroyos y también tratar el uso de los bajos y de los posibles reservorios como una forma de mayor capacidad y conducción hidráulica", explicó Gschaider. Se trata de ampliar el ancho del arroyo, hacer un perfilado de cemento y realizar derivadores y readecuaciones de las redes. El proyecto contempla la construcción de dos canales aliviadores sobre las avenidas 131 y 143 que desembocarán en el Del Gato.