Palermo Zoo, el barrio de vanguardia que sucede al Soho porteño
Emprendedores que buscan salir del circuito palermitano típico se instalan en la zona del Botánico que no deja de crecer; bares con veredas que son vidrieras y tiendas de diseño revalorizan el barrio
En Palermo hay un nuevo circuito para la gastronomía y el arte. En poco tiempo, el perímetro que bordea República de la India, Libertador, Scalabrini Ortiz y Gutiérrez se llenó de bares, diseñadores y galerías de arte que convirtieron al barrio en un referente en estas cuestiones y le hace sombra al Soho porteño.
"Palermo [por el Soho] había perdido el encanto para instalarme. Lo veía más como un paseo de shopping", dice María Lee, dueña de Panorama , una boutique que llegó hace dos años y que concentra a más de 40 diseñadores nacionales que no pertenecen al circuito comercial.
A los tradicionales vecinos del Palacio de Los Patos y La Colorada se sumaron los recién llegados al Palacio Bellini, que incluye viviendas, oficinas y hasta un hotel. Ellos se mezclan entre quienes asisten al templo Yeshurun y los que van a la iglesia Santa Elena y contribuyen a reforzar el carácter cosmopolita de la zona.
"El barrio es infalible. La diferencia con Palermo [por el Soho] es que acá está lleno de gente todos los días", resume Lucila Zeballos, dueña de Birkin, un café que abrió hace 9 meses y que desde entonces funciona exitosamente, al igual que sus vecinos, Bengal, Tiendas Naturales, Coco y la heladería Cibiana.
Por los bares de Árabe Siria el ambiente es desestructurado: meetings improvisados pero no tanto, charlas de café prolongadas, personas relacionadas con el mundo del arte y looks rigurosamente pensados, forman la postal de esta zona. "Parece Nueva York", comenta una mujer mayor a su compañera de caminata.
Susana Ashardjian, una bróker inmobiliaria que trabaja en Palermo Zoo hace 20 años comenta: "En los últimos meses esta parte [de Palermo] levantó mucho, aunque sin perder la esencia del barrio y creo que esa combinación resulta muy atractiva para el comercio y también para quienes eligen venir a pasear".
Amanece el barrio
La actividad empieza alrededor de las 10 de la mañana y alcanza sus picos para el almuerzo y el té, aunque al turno noche también le está yendo muy bien. "Ahora hay movimiento hasta las 2 de la mañana", reconoce Ashardjian.
"El negocio funciona muy bien y si está pensado y hacés una propuesta clara, la gente responde. Cuando vengo caminando reconozco las caras de los vecinos que van alternando las distintos ofertas de la cuadra", dice María Inza, dueña de Tiendas Naturales.
Inza admite que cuando pensó el lugar para plasmar el emprendimiento fue determinante saber que aquí iba a a tener clientes todos los días. "De lunes a viernes viene la gente del barrio y los alrededores, que ya es mucha y los fines de semana vienen de todos lados", dice.
La alta densidad de población de la zona, los vecinos proclives a comer afuera y las veredas que son vidrieras convirtieron a esas cuadras en un polo gastronómico con más de 10 propuestas para comer: comida india, italiana, y saludable "con onda" se suman al ya consagrado boulevard Cerviño donde están VoulezBar, Guido y Olivetti.
Para los que quieren cocinar en casa también hay posibilidades interesantes, el deli gourmet Pick Market, y algunos almacenes kosher ofrecen gran variedad de productos orgánicos y de primera línea.
Arte emergente
Los 40 diseñadores que concentra Panorama, no están solos. Aquí también está Agustina Dubié , una diseñadora de nicho formada en Londres, que exhibe sus creaciones frente al Botánico hace más de un año. "Cuando buscábamos local queríamos que la gente venga intencionalmente. En Palermo Viejo nos parecía que estaba todo muy junto y la idea era que la clienta se detenga a mirar con la cabeza más despejada", dice Dubié.
Otra referente, unas cuadras más alejada, es Miau Miau una galería de arte contemporáneo concentrada en la obra de artistas emergentes que es fiel a la zona desde hace 3 años.
Aquí los prolongados meses de caída de la activad comercial aún no llegaron a la zona. Sólo es cuestión comprobar de qué se trata el Palermo Zoo.
Nombre del barrio
Palermo Botánico, Palermo Verde, Palermo Chico y por último Palermo Zoo fueron algunas de las denominaciones que surgieron en las entrevistas. Aquí se tomó la sugerida por Lee, por la autoridad que le da ser nativa del barrio y conocer milimétricamente la zona, vecinos y comerciantes de Palermo, Palermo Zoo.