Voyager 1, en las afueras del sistema solar
PASADENA, EE.UU. (DPA).- La nave espacial estadounidense Voyager 1, lanzada al espacio hace 27 años, ha pasado la frontera última del sistema solar, anunció el Instituto de Tecnología de California (Caltech), en Pasadena, Estados Unidos.
La nave ha entrado ya en una turbulenta zona donde acaba la influencia del Sol y el viento solar choca contra el gas interestelar, según el anuncio de Caltech, que controla el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la agencia espacial estadounidense NASA, responsable de la construcción y operación de las naves Voyager 1 y Voyager 2.
En noviembre de 2003, el equipo Voyager supuso que la nave había alcanzado la zona donde el viento solar, un chorro de partículas cargadas eléctricamente que fluye continuamente desde el Sol, es frenado por la presión del gas interestelar, al tiempo de volverse más denso y más caliente.
Ahora, el equipo cree que el Voyager 1, a unos 14.000 millones de kilómetros del Sol, ha entrado definitivamente en esa zona más allá de esa frontera. Según Caltech, la evidencia más convincente de que la nave ha pasado ese límite es que ha registrado un súbito incremento del campo magnético portado por el viento solar, combinado con un decrecimiento de su velocidad. Esto ocurre cuando el viento solar disminuye su velocidad.
En diciembre de 2004, los magnetómetros a bordo del Voyager 1 observaron que la fuerza del campo magnético subía súbitamente, tal como se espera cuando el viento solar se desacelera. El campo magnético ha permanecido a ese nivel desde diciembre.
La nave observó asimismo un incremento del número de electrones y iones de alta velocidad cargados eléctricamente, cosa que se esperaba que ocurriera si el Voyager 1 pasaba la frontera final del sistema solar, llamada shock terminal.
Las naves Voyager 1 y 2 fueron equipadas con paneles solares que les suministraron la energía necesaria para su largo viaje dentro del sistema solar hacia los planetas Júpiter y Saturno. Para el momento en que esos paneles dejaran de estar activos por falta de energía solar las naves fueron provistas de tres generadores termoeléctricos radioisotópicos.