Adaptable
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Ni es un montaje ni es una imagen creada mediante inteligencia artificial. Es un Husky en las playas de la ciudad de Nouakchott, Mauritania, en el desierto del Sahara, donde la raza se está volviendo muy popular. El problema es que estos animales, criados en el polo ártico para arrastrar trineos, deben aquí soportar temperaturas que regularmente alcanzan los 40 grados Celsius. No obstante, y aunque al resistente can se lo ve acalorado, los perros tienen dos capas de pelaje. La externa los protege del agua, la nieve y la suciedad, y la inferior, compuesta de pelos más suaves, funciona como un aislante térmico, no solo contra el frío, sino también contra el calor. Algunas razas solo presentan la externa, pero los Husky tienen bien desarrolladas ambas y son por lo tanto sumamente adaptables. Ignoramos, sin embargo, si el de la foto se ha permitido, además, algún que otro chapuzón refrescante en el mar.
