Cartas a un amigo argentino
El autor de Ferdydurke dejó Buenos Aires en abril de 1963, después de veinticuatro años de vivir casi como un desconocido en la ciudad. La fama lo esperaba en Europa. Desde allí mantuvo correspondencia con Juan Manuel "Goma" Gómez, compañero argentino que había conocido en 1956. Ese epistolario será editado por Emecé, con un prólogo de Ernesto Sabato. Los fragmentos que se publican a continuación, en los que se han respetado la ortografía y la sintaxis originales, revelan el peculiar estilo humano del escritor.
Berlín, 24 de mayo de 1963
Goma de mi alma:
ME limito a decirle que por el momento mi estada en París parece todo un éxito, la prensa ha demostrado gran interés por mi persona, di 8 interviews de los cuales 5 muy importantes, ya aparecieron dos en ARTS y en LEMONDE, grandotes y hasta diría sensacionales. Alrededor de mí se formó un revuelo de proporciones, tuve que correr de un lado a otro, como dice LE MONDE se forma alrededor de mí una maçonnerie internacional. Las damas más distinguidas gritaban "¡ah, qué felicidad, la suya!" cuando Leonor Fini les anunciaba mi presencia en su casa. Yo insulté por las dudas bastante a los franchutes en los interviews, comparándolos con los perros de Pavlov, etc. Ay, Goma, ¿qué hago aquí, por qué, cómo, hasta cuándo? Calculo que ya gané 30 mil pues estoy 5 días en Berlín, no vi ni un solo centavo, en cambio vivo como un rey. Berlín es impresionante, archimoderno, una ciudad-jardín, el clima es de suspenso, me tratan con hospitalidad conmovedora pero "ojalá dure" como decía la madre de Napoleón. Me imagino que en París me salió todo bien porque en realidad todo esto no me interesaba en absoluto, invadido por el sentimiento patrio, perdido en el mundo, abstraído, ensimismado, decía cualquier cosa y estaba somnambúlico. El casamiento será representado el 15 de junio, pero sólo dos veces, en un concurso para los régisseurs. El Diario aparecerá ya este año, lo más pronto posible, Nadeau quiere editar también mis piezas de teatro este año, hay viento en popa. Lo malo que otra vez me robaron el Formentor, pero nadie toma en serio este premio comercializado, de todos modos he sido una de las vedettes allí. Comprobé ya que mis conocimientos de Sartre y Heidegger sobran para poner en aprietos los más agudos intelectos tanto de Francia como de Alemania. [...]
W. G.
Berlín, 5 de agosto de 1963
[...] Goma, póngase en contacto con Marta Lynch, Madero 222, Vicente López. Autora de una novela premiada La alfombra roja , edad 30, casada o soltera, me escribió una carta dramática diciéndome que justamente cuando ella después de terribles vacilaciones se animó a acercarse al genio, el genio se fue. Leyó Ferdy [ Ferdidurke ], La Porno [ La pornografía ] y el pedazo de Diario sobre Retiro. Me ama? Parece inteligente y simpática, puede ser que Ud. Goma tendrá una buena compañera para charlas interminables sobre mí (es curiosísima de cada detalle), escríbale que yo le pedí que sea ante ella algo así como mi embajador plenipotenciario. Ya lo mejor póngala en contacto con la muchachada. [...]
W. G.
Berlín, 8 de agosto de 1963
[...] Terminé hace unos días el Diario Transatlántico y volví al Cosmos que dejé justo el día 19 de marzo al enterarme de que la Ford me invita. Hoy llegué al punto final, pero provisorio ya que se trata de esbozos para solucionar el final. Yque no me satisfacen. Aquí en septiembre aparecerá La Porno (Verrfühurung-Seduzione), además Akzenten [revista alemana] publica mi nota contra las restricciones nuevas de libertad en Polonia y un fragmento de la Porno y un resumen de la prensa parisiense; y Der monat empieza la publicación del Día. Trans-A. Así que mi voz retumbará en toda Alemania. Fíjese, Goma, que hace una semana di un interview a la radio RIAS y no sé lo que dije, ya que hablaba en francés y lo traducían enseguida en alemán (todo ante el micrófono). Y he aquí que ya ayer llegó la principal revista cultural (bolche) de Polonia con una nota enorme en las primeras dos páginas diciéndome que soy traidor de la patria. [...]
Ayer estaba cenando con el príncipe Nicolás Nabokov, primo hermano de Lolita -ocurre que es una excelente familia, lo que yo no sabía. El príncipe vive en un imponente palacio, es concejero cultural de Berlín y es él quien me invitó junto con Jelenski (los dos muy amigos). Admirador. Músico bastante conocido, con varias obras estrenadas, persona muy iniciada en París, amigo de Camus, de Maritain, etc. Estaba pasmado con mis conocimientos de música. Anteayer inicié en Zuntz las reuniones artísticas pues quiero dotar esta ciudad de un café artístico. Escritores: Grass, Johnson, Weiss, director de der Monat, Jaesrich, prof. Hollerer (especie de Victoria Ocampo), etc. Lamentablemente no puedo insultar a nadie, lo que otorga no sé qué de irreal al ambiente, veremos después. [...]
W.G.
Berlín, 5 de octubre de 1963
[...] La novela de la Lynch resultó ilegible (no le diga esto, sabe) y con furia meditaba qué es lo que tengo que contestar, por fin le escribí unas palabras, que tuvo una idea horrible mandándomela pues el hecho que se declaró mi admiradora me impide cualquier elogio y que en general me da lo mismo si la novela es buena o mala.
Qué cosa extraordinaria los Alemanes, difícil decirlo, me da una especie de risa interna crónica. En esta ciudad que ha sido un infierno no se ve otra cosa sino salud, sonrisa, tranquilidad, inocencia, perritos, amabilidad, cordialidad, bondad, aquí donde todo estaba arruinado el nivel de vida es increíblemente elevado, si los mozos de café no tienen coches como en Francia es porque el espacio es reducido. Todos tienen plata y bastante, ni se sabe lo que es el proletariado, todos andan vestidos como Ud. o mejor. Estuve en la ciudad estudiantil, más coches que estudiantes, ahora todos los alemanes padecen de una estupidez extraordinaria, de veras son estupidísimos. Además, Goma, no comen pan, el café es horrendo, no hay casi sandwiches y cuando le sirven ponen delante de la persona el plato con tostadas (hay) y el café con leche (crema)más allá. Cada alemán sabe lo que tiene que hacer y lo hace así toda la vida sin el más mínimo cambio. Ya sabe qué son los mozos en B.A.: envidiosos, amargados, peronistas, bien aquí son atentos, sonrientes, amabilísimos, corriendo, con vocación verdadera de mozo, con profundo y sincero respeto! Cuando uno se da cuenta que todos casi eran asesinos, torturadores (arriba de 40 años)... esto es genial, no hay caso. Bolches no hay. Aman tiernamente a los yanquis. Son 100% europeos, antinacionalistas, pacifistas. Goma, son geniales no cabe duda.
Los mejores escritores, Grass, Peter Weiss, Uve Johnson, están aquí, no es gran cosa, que digamos, Arnesto [Ernesto Sabato] es mejor, no es literatura espiritual sino social, estética, etc. [...]
W.G.
Berlín, 16 de abril de 1964
[...] Ocurre que tengo MIOCARDITIS es decir inflamación del músculo del corazón a raíz de tantas gripes (que a su vez se deben a que el organismo con corazón debilitado no tiene bastante defensa). Me curan los más famoso médicos de Berlín y dicen que yo seguramente ya tenía una miocarditis sin saberlo. Supongo que en 1957, después de la gripe, cuando me fui primero a Tandilu y después a Santiago. [...]
W. G.
Royaumont, 12 de junio de 1964
[...] 1) Me propongo volver a la Arg. en setiembre, supongo que mi salud me lo permitirá.
2) Con seguridad le puedo decir que B. A. está para mí vedado. El humo de los colectivos y, en general, el aire viciado no me lo permitirán (salvo una habitación excepcional, que sé yo, en la Costanera). Por lo tanto, Goma, la única posibilidad sería de encontrar algo p.e. en Santos Lugares (lo que, me imagino, no sería tan lejos de su oficina). [...]
Aquí, en Royaumont, estoy de lo más bien. Es un lugar distinguidísimo y bello, la campiña alrededor encantadora, valles y bosques, de París 30 klm. así que a cada rato llega gente (hay como 50 habitaciones en el viejo dormitorio de los monjes)y, cuando se supo que estoy aquí, llegan admiradores. [...]
W. G.
París, 10 de septiembre de 1964
Goma: le contesto enseguida porque estoy ya por volar hacia Nice, de donde un ómnibus me llevará a la altura debida. [...] Allí, en los Alpes Maritimes, estaré con una joven canadiense (23 años) [Marie-Rita Labrosse, después esposa y viuda de Gombrowicz] de extraordinaria eficacia y que me ama tiernamente y me procurará cuidados. [...]
W. G.
Vence, 15 de noviembre de 1964
[...] Rita es una niña que digamos moderna, desde 5 años vive en París escribiendo una tesis sobre Colette (todavía reúne materiales), amiga de Dalí, etc. Le encantaría, Goma, es vivísima, nada tonta, charla, ríe, jode, cocina, viste (muy bien) es de la última ola y en el viento (dans le vent). Frescura del alma. Exigente en el amor. Enloquecida conmigo. Carita enloquecedora, cuerpito bikini. [...]
W. G.
Vence, 25 de noviembre de 1964
Yo le estoy suplicando, Goma, desde que dejé las costas sudamericanas que no me mande certificadas. Bueno, su última, además de ser certificada expres, es la más estúpida que hasta la fecha recibí. 1º ¿Acaso no sabe que Ferdy ha sido editado en Italia hace 4 años? 2º Se imagina, tontamente, que no he recibido su penúltima con la carta yugoslava y ¡da la casualidad que la recibí! 3º No venga haciendo líos con Arnesto cuyo prefacio me resulta lleno de brillos y hechizos, además de ser muy talentoso como todo que escribe él. Va a ver, Goma, que terminará por sembrar entre nosotros desconfianza y recelo, ya verá, la gente lo repite todo, no sea pavo 4º Como si fuese poco Ud., en vez de mandarme noticias , trata, según parece, en 5 carillas de enseñarme la filosofía de Sartre. ¡Jua, jua, jua! Lo de que el dolor o el placer cobran valor dentro de la perspectiva del existente, de su mundo, de su situación, de su finalidad, de su futuro, de su proyecto, esto lo sabe cualquier niño. Lo que no saben algunos adultos recién iniciados es que en Sartre (como en todo cartesianismo) el ser se funda en la conciencia, es decir, que si Ud. es consciente de este vaso, el vaso es ( aunque no le procuraría ni placer, ni dolor ). Esto es lo que yo condeno, tarado, pues lo sé hondamente que la existencia no es una relación suelta, tranquila, sino una relación convulsa -y no una libertad (igual en qué sentido) sino una tensión . Todas las estupideces de Sartre provienen del hecho que se relacionó con el dolor con una tranquilidad doctoral típica para los cartesianos. No comprendió ni el cuerpo, ni el dolor. Por lo tanto le sugiero, Goma, amistosamente que diga a todos los amigos que lo considero a Ud. bastante tarado. Salú.
W. G.
Tormenta de sentimientos
EN 1944, en Buenos Aires, conocí a Gombrowicz, con aspecto de adolescente, flaco, enjuto, fumando y chupando cigarrillos con furia; era teatral, contradictorio, provocador, altanero y disponía de un increíble sentido del humor.
Yen 1967, allá en Vence, cuando lo vi por última vez, envejecido por la enfermedad y el presentimiento de la muerte, ese corazón enorme al que una fuerza del cosmos le había prohibido mostrar sus afectos, con el filo de su genio intacto, nos abrió la puerta para cerrar ese arco de veintitrés años con una verdadera tormenta de sentimientos. Estas cartas que Gombrowicz le escribió a mi entrañable Goma son como un punto intermedio entre la sinceridad y el artificio, que convocan otra vez a la barra argentina, pedacitos de eternidad de un hombre que pensaba "si el formalismo creciente no es compensado por lo humano, la poesía y la pasión perecerán".
Querido Gombrowicz, con ese "ha llegado el momento de tutearnos" que me escribiste en 1963, desde Berlín, cuando estabas muy enfermo, te digo: sigo sintiendo que tu fantasma, como el de Hamlet en Elsinor, nunca ha dejado de habitar este país al que tanto amaste, por tu mérito espiritual y literario, pero muy especialmente, por el honor que nos hiciste de vivir un cuarto de siglo con nosotros, aquí, en la Argentina.