Grafitis digitales para cuidar Florencia
Para evitar el vandalismo, instalaron varias tabletas en el campanario de Giotto
ROMA.- Ya no va más eso de sacar un marcador o, peor, un cortaplumas para dejar sobre una pared milenaria la marca de una visita a un lugar histórico. Desde ayer, quienes visitan el campanario de Giotto, uno de los lugares más emblemáticos de Florencia, podrán desahogar ese deseo incontrolable de dejar marcado su paso por ahí a través de pizarras digitales.
Las tabletas fueron instaladas en el primero, el tercero y el cuarto nivel del campanario de casi 85 metros de Giotto, famoso por sus mármoles blancos, rojos y verdes, como los del adyacente Duomo. "Bienvenidos al campanario de Giotto. Desde hace siglos conservamos capolavori: desde hoy los grafitis de sus paredes serán removidos enseguida, pero si nos dejan su mensaje digital, lo vamos a conservar para siempre, como una obra de arte", indican los carteles puestos junto a los dispositivos.
Se trata de una campaña antivándalos y antigrafitis emprendida por la Opera di Santa Maria del Fiore, que cuida el patrimonio de ese grupo de monumentos. Las paredes internas del campanario -que tiene 414 escalones y que Giotto comenzó a construir en 1334- tenían un deterioro total, arruinadas por centenares de marcas de todo tipo: fechas acompañadas por nombres, declaraciones de amor, corazones...
Tras una maxilimpieza de tres meses, el campanario luce como nuevo. Y fue creada una app, Autography, que permite satisfacer el afán de dejar constancia de que uno estuvo ahí. Con la app se puede dibujar en diversos estilos y elegir los colores y la superficie en la cual dejar para la posteridad un mensaje, sobre las tabletas.
"Así, el deseo de «dejar una marca» de la visita no es reprimido y uno puede expresarse libremente no sólo sin dejar daños, sino con la certeza de no desaparecer con restauraciones que serán inmediatas y, además, con la perspectiva de formar parte de un documento destinado a durar en los siglos", explicaron los creadores del proyecto.
El graffiti digital, en efecto, será descargado, catalogado y conservado en el Archivo histórico de la Opera di Santa Maria del Fiore, junto a documentos tan valiosos como los que acompañaron la construcción de la espectacular cúpula del Duomo, de Brunelleschi, o los registros de bautismo de nombres ilustres como el de Amerigo Vespucci o la Gioconda.