
Guillermo Roux donó una pintura sobre San Martín
La entregó al Instituto Sanmartiniano
El Instituto Nacional Sanmartiniano recibió una donación del artista Guillermo Roux, que entregó el cuadro original con la imagen del general José de San Martín, que el año último había realizado especialmente por pedido de La Nación .
La obra ilustró la tapa de un suplemento especial dedicado al prócer, que se publicó el 14 de agosto de 2000, con motivo de haberse cumplido 150 años de su muerte.
El vicepresidente de la entidad, doctor Rodolfo Argañaraz Alcorta -en ejercicio de la presidencia por estar ausente su titular, general (R) Diego Soria- recibió el cuadro de manos del autor.
La donación fue agradecida por el vicepresidente segundo, profesor Enrique Mario Mayochi, junto con los miembros de la Academia del Instituto: doctor Isidoro J. Ruiz Moreno; capitán de navío Guillermo J. Montenegro; los coroneles retirados Luis González Balcarce y José Luis Picciuolo, y el ingeniero Carlos Alberto Guzmán.
Nacido en Buenos Aires en 1929, Guillermo Roux es uno de los artistas argentinos con mayor reconocimiento internacional.
La imagen
El retrato del Libertador, una acuarela de 76,5 por 58 cm, lo muestra de frente, con cierta seriedad tensa en la mirada, la mano izquierda asiendo un flanco de la bandera argentina que pende de sus hombros.
En tanto, la derecha -el rasgo más llamativo de la obra- está levantada a la altura del pecho y con el índice apuntando hacia adelante.
"Con ese gesto de reconvención -explicó Roux-, quise interpretar un San Martín al que no le gustaría mucho este país, de modo que opté por desdeñar una estampa victoriosa o satisfecha. Pensé que un símbolo mayor de nuestra historia debía tener una imagen más activa, desde la cual nos dijera algo para estos tiempos.
"No lo podía representar en forma pasiva ni distante, en un altar donde nada lo roce. Preferí hacerlo mirándonos y señalándonos, como reclamándonos la parte que nos toca en la construcción de esta Argentina", expresó.
El artista contó que el pedido de La Nación para que realizara el cuadro le había hecho entender cabalmente "aquello del tiempo periodístico", ya que sólo disponía de pocos días para estar en fecha con la edición del suplemento conmemorativo.
"Pero, encima, no quise basarme en las figuras tradicionales. Pretendía un San Martín vivo , así que pedí urgente un modelo a una agencia. Vinieron unos cinco. El último me conformó. Un hombre medio desconfiado, mas aún cuando le dije a quién iba a representar. Yo mismo lo vestí, lo maquillé y, por supuesto, le indiqué cómo debía posar", agregó Roux.
El destino de la obra
Al referirse a su decisión de donar la obra al Instituto Nacional Sanmartiniano, el pintor calificó como "muy de su agrado" ese destino, por la importancia de la entidad en su objetivo permanente de dar a conocer la vida y la obra del Padre de la Patria.
En el citado suplemento, el propio autor explicó el significado de su obra. Dijo: "Desde el fondo de la historia, José de San Martín, a quien llamamos el Padre de la Patria, nos hace una ineludible pregunta: "¿hemos sabido construir esta Nacion Argentina por la que él luchó? Está en cada uno de nosotros la respuesta".