Agustín Creevy: "Ojalá algún día se dé el partido que tanto soñamos"

CANBERRA, Australia.- El dolor por la derrota llevará varios días para cicatrizar. En algún pasaje de la noche sintieron que por fin podría haber llegado esa celebración que tanto se les niega. Pero los semblantes de los Pumas en la fría noche de Canberra dejaron entrever signos de preocupación por lo exhibido en el segundo tiempo frente a los Wallabies. "Sentimos frustración. Después de tanto sacrificio y entrega es muy duro el hecho de haber perdido el partido de esta forma. Hay que seguir trabajando. Honestamente es algo que me cansa decir pero siento que no queda otra", expresó Agustín Creevy. Con respecto a la seguidilla de resultados adversos -ya son 13 caídas consecutivas ante equipos del Tier 1- el capitán aseguró que el argentino es un equipo preparado para afrontar los momentos más complejos. "Somos fuertes de la cabeza. Vamos a seguir adelante y con ganas de corregir todo lo que hacemos mal. Ojalá algún día se dé el partido que tanto soñamos. Todavía no lo podemos concretar porque nunca jugamos los 80 minutos como nos gustaría", expresó con autocrítica.

El triunfo de Australia se dio en el marco de una ciudad que le dio la espalda al Rugby Championship debido a la crisis institucional que atraviesa la Unión Australiana. Apenas 14.229 espectadores concurrieron al Gio Stadium. Un número que quedó al borde de ser el peor registro en la historia profesional de los Wallabies. También este año, contra Fiji en Melbourne, habían asistido 13.583 personas. Nada de eso impidió el vendaval de los locales en el segundo tiempo.

"Erramos mucho en los primeros tackles y el cambio de actitud de ellos se vio claramente, fueron vistosos. Los Wallabies salieron a buscar el partido y nosotros fuimos pasivos en defensa. Se nos metieron, nos marcaron muchos tries", analizó Creevy. "Cometimos muchos errores. Varios de esos tackles eran sencillos, ahí estuvo el mayor problema. Fuimos pasivos y la culpa fue nuestra porque no salimos a ser agresivos", admitió Daniel Hourcade. A los malos resultados se les suman las lesiones. Ramiro Moyano sufrió una fractura del tercer metacarpiano de la mano derecha con desplazamiento. Deberá ser operado y calculan que su tiempo de recuperación demandará entre cinco y seis semanas. Matías Moroni, otro de los que había disputado un destacado encuentro, jugó el segundo tiempo con un traumatismo en la mano derecha.

El plantel argentino regresará hoy a Buenos Aires.