Apuestas y arreglos en el tenis: el jugador expulsado en Buenos Aires también fue rechazado en Cancún
Artsiom Dabryian, el tenista bielorruso expulsado hace una semana del club El Abierto, de Saavedra, donde se estaba disputando un ITF World Tennis Tour (ex Future), por estar sospechado de apostar y arreglar partidos, dejó la Argentina y viajó a Cancún, donde ayer comenzó un certamen de la misma categoría, un M15 (con 15.000 dólares en premios) y también fue expulsado. La publicación de ayer en LA NACION, en la que se describió el dudoso proceder de este jugador de 26 años y al que las autoridades de El Abierto le aplicaron el derecho de admisión, fue leída por los organizadores del torneo mexicano, quienes identificaron de inmediato al jugador.
"Estamos enterados de lo que está pasando. He visto al chico aquí, no va a participar del torneo y lo sacamos del hotel. Ya estamos en contacto con los responsables del torneo que se jugó en Argentina y las medidas preventivas ya fueron tomadas. El chico está bajo supervisión y monitoreado por el equipo de seguridad y por las cámaras", le comentó a LA NACION, desde la Cancún Tennis Academy (escenario del certamen), Thiago Coutinho, director del M15.
Dabryian llegó a tener ranking ATP: su mejor posición fue 1764º, en 2015. En dobles fue 974º, en 2017. Pero hoy ni siquiera posee clasificación ITF. Y en la temporada lleva jugados solo tres partidos en esa categoría y dos de ellos los perdió 6-0 y 6-0. En el M15 que finalizó el domingo pasado en Buenos Aires, con el título de Francisco Cerúndolo, el bielorruso fue alternativa Nº 32, es decir que tenía mínimas posibilidades de actuar. De todos modos, permaneció en el club durante varios días y su actitud alertó a las autoridades. "Estuvo viniendo toda la semana y no tuvo la actitud de un jugador de tenis: no pedía cancha de entrenamiento, ni pelotas, ni buscaba gente para jugar dobles. Circulaba por el club todo el día en forma sospechosa (...) Iba de cancha en cancha, se paraba en una, sacaba el celular y lo tocaba, cuando nos veía a algunos de nosotros lo guardaba y caminaba", dijo Alejo Russell (h.), supervisor del torneo.
Russell le envió un e-mail a la Federación Internacional de Tenis (ITF) reportando la situación y recibió la autorización para echarlo de las instalaciones. Así se lo hicieron saber al jugador, pero Dabryian se resistió y rompió el papel de la notificación de la ITF. Luego de varios minutos de discusión, y tras la aparición de un efectivo de seguridad privada de El Abierto, se retiró del complejo. Un día después apareció en el club, pero en el exterior, trepado en un alambrado, intentando ver partidos desde allí y apostar. Evidentemente, no estaba en Buenos Aires para competir al tenis.
El circuito, mientras tanto, sigue su marcha y las autoridades del M15 de Cancún, advertidas del peligro, también actuaron con firmeza.