Moriatis mantiene la ilusión

De la Redacción de LA NACION.- LA PLATA.– Que el ganador se imponga de punta a punta no significa que la carrera haya sido aburrida. Es como el partido sin goles en el fútbol, no necesariamente se hunde en el tedio. Emanuel Moriatis largó adelante, picó en punta y jamás abandonó el primer lugar de la penúltima fecha de la temporada del TC, en el autódromo Roberto Mouras, de La Plata. Y pese a esa característica, la emoción se mantuvo durante las 25 vueltas de la competencia, ya que tanto el piloto de Ford como sus más inmediatos perseguidores, José María López (Torino) y Agustín Canapino (Chevrolet), alternaron posiciones y protagonizaron maniobras fantásticas.

Sin embargo, en el podio no se juntaron los tres. Si bien Moriatis subió con su auto (el autódromo platense permite que la máquina también se luzca ante el público), también ascendió López, pero por el tercer lugar llegó Lionel Ugalde (Ford), que heredó ese puesto tras el roce y despiste de Canapino, en el ingreso de la recta principal a metros de la bandera a cuadros (ver aparte), por lo que finalmente terminó cuarto.

"Casi no descontamos nada en el campeonato, porque Pechito [López] está muy firme, pero para nosotros era muy importante ganar y eso lo conseguimos en una carrera muy dura", explicó Moriatis, que agregó: "López y [Agustín] Canapino no me dejaron descansar ni un segundo. Para colmo, en la última parte me costaba llevar mucho el auto porque se iba de cola. Igual tenía un auto muy bueno. Cuando se ensució la pista, comenzó a perder grip [adherencia], pero pudo aguantar el ritmo".

No bien comenzó la competencia, el golpe de escena lo protagonizaron Guillermo Ortelli y Ugalde, que pugnaban por el cuarto puesto. Un roce entre ambos en el primer curvón derivó en el despiste del pentacampeón, que terminó 18°. Si bien tiene posibilidades de ganar la corona, ya que los números lo permiten, el piloto de Salto casi se despidió de la definición en el escenario porteño, el 20 del actual.

Pechito López no ganó nada ayer. Tras lograr la pole position, el cordobés no pudo imponerse ni en la primera serie (se la ganó Moriatis) ni en la final, pero con sendos segundos puestos, se mantiene arriba en la Copa de Oro.

Frente a la solidez de Pechito, que viene de ganar el bicampeonato en el TC 2000, un rival de significación es Mariano Altuna, que está segundo en los playoffs, a diez puntos, tras el 6° puesto. El piloto de Lobería sufrió los inconvenientes que se produjeron en su equipo, porque el dueño de su Chevrolet pretende llevárselo, ya que hay diferencias económicas por algunas publicidades. Ante el inconveniente, el preparador Walter Alifraco intentará poner paños fríos, por lo menos hasta la última fecha, para encaminar las fuerzas y buscar el título. "No estuve concentrado, al contrario. Este tema me sacó de la carrera. Me aislé 20 minutos antes para ver si me podía concentrar, pero no pude. Veremos qué hago para Buenos Aires. Corro con cualquier auto [Alifraco le alistaría otro Chevrolet]. Hasta con mi Bora de calle", dijo Altuna.

Moriatis ganó y se ilusiona. López mantiene su firmeza y Altuna llega como puede a la gran definición.