El regreso de los rugbiers de Europa para jugar en los Pumas quedó stand-by

El regreso de los argentinos que actúan en Europa a los Pumas tendrá que esperar. La idea con la que asumió el nuevo consejo directivo de la Unión Argentina de Rugby se vio alterada por dos factores: el progreso reciente de los Jaguares y la partida de Nicolás Sánchez al rugby francés. De seguro, la vuelta no se producirá en los próximos compromisos del seleccionado. Del desarrollo de los test matches ante Gales y Escocia, en buena medida, dependerá si se les abre una puerta a modo de excepción para el Rugby Championship.

Los cuatro éxitos consecutivos de los Jaguares en la gira por Oceanía ante rivales de primera línea del Súper Rugby generó la sensación de que el plantel está en condiciones de superar a los seleccionados que visitarán la Argentina en junio sin necesidad de recurrir a la ayuda del exterior. La ida de Sánchez a Stade Français a partir del año que viene encendió la alerta sobre la posibilidad de que la fuga sea mayor si la apertura no se maneja con precaución.

A partir del ingreso en el Súper Rugby en 2016, la UAR instauró la prohibición de jugar en los Pumas a aquellos que actúan en el exterior para conformar un equipo competitivo. En los primeros dos años esto no solo no ocurrió, sino que socavó el potencial del seleccionado nacional. Por eso, Marcelo Rodríguez asumió a fines de marzo con la firme decisión de posibilitar una apertura.

"Después de reflexionar con la mesa directiva decidimos que vamos a sostener la regla por lo menos hasta junio", confirmó Rodríguez a LA NACION. "Vamos a tomarnos tiempo para preservar el sistema. Después de junio nos vamos a basar en las necesidades que plantee el staff técnico. Si hay un pedido excepcional en el Rugby Championship por necesidades de cubrir algún puesto o por lesión, lo analizaremos".

Daniel Hourcade, entrenador de los Pumas, esperaba contar con algunos jugadores del exterior y había comenzado a hacer sondeos cuando la medida quedó en stand-by. Por ejemplo, para la primera concentración del año había incluido solo a tres pilares, mientras que para la segunda, la semana pasada, sumó a tres más: Javier Díaz, Juan Pablo Zeiss y Santiago Medrano. Los Pumas enfrentarán a Gales y Escocia con primeras líneas de recambio sin experiencia internacional y con un recorrido fugaz en el Súper Rugby.

El puesto de apertura es otro que quedó expuesto a partir de la salida de Sánchez y el retiro de Juan Martín Hernández. Joaquín Díaz Bonilla, el tercer apertura de Jaguares, solo jugó 12 minutos en la temporada y no fue tenido en cuenta por Hourcade. La alternativa hoy es Santiago González Iglesias, preferido como primer centro.

Pero la alerta que encendió la salida de Sánchez fue la posibilidad de que se fueran más jugadores. Jugar en Europa no solo representa una mejor oportunidad económica, sino también un estilo de vida completamente distinto. "La decisión responde principalmente a la necesidad de estar más tiempo en mi casa con mi familia. El Súper Rugby está buenísimo, pero es desgastante", dijo el tucumano a la nacion. "Es muy duro tener que viajar todo el tiempo y estar un mes afuera de tu casa, especialmente con un hijo chico. También se hizo difícil para mi mujer estar sola en Buenos Aires". El apertura de 29 años se casó en 2015 con Juliana, también tucumana, y tienen a Juan Cruz, de un año.

Sánchez se suma así a otros jugadores importantes que dejaron recientemente el equipo, como Facundo Isa, Ramiro Herrera y Lucas Noguera Paz. De los referentes, otros dos jugadores tienen contrato hasta fin de este año: Agustín Creevy y Joaquín Tuculet. El resto, hasta fin de 2019. "A los jugadores los están tentando constantemente con irse afuera, y que tengan la posibilidad de seguir en los Pumas hace que presten más interés en las ofertas", explicó José Santamarina, manager de los Pumas.

Del otro lado, Juan Cruz Gómez Oromí, gerente de Recursos Humanos de la UAR y encargado de negociar los contratos con los jugadores, le pone paños fríos a la cuestión. "Hoy el grupo está muy consolidado y homogéneo. No hay planteos del tipo de tengo ofertas afuera, me quiero ir, quiero un mejor contrato. Hay una relación de sinceridad".

Aunque el equipo está blindado hasta el Mundial, y más allá de que exista la posibilidad de pagar la cláusula de recisión, el proyecto va más allá y la UAR quiere evitar una sangría post Japón 2019. Será inevitable, como ha pasado hasta aquí, perder piezas importantes. La cuestión es hasta dónde se podrá sostener una base que garantice un equipo de Jaguares competitivo. Y en el corto plazo, si el envión anímico de los Jaguares les alcanzará a los Pumas para volver a la senda del triunfo sin la necesidad de recurrir a los europeos. La ventana de junio dará un primer panorama.

Boffelli, como fullback

Mario Ledesma se decidió por Emiliano Boffelli para ocupar la posición de fullback, este sábado, en el regreso de Jaguares a la Argentina para enfrentar a Bulls. Tryman del conjunto de nuestro país, Boffelli ocupará el lugar del lesionado Joaquín Tuculet. Tampoco estará Ramiro Moyano en la otra punta, por lo que los wines serán Bautista Delguy y Sebastián Cancelliere. Como hooker, volverá Agustín Creevy.

En lo que será el reencuentro con el público argentino después de la exitosa gira por Oceanía, la formación de Jaguares para enfrentar a Bulls, a las 18.40 del sábado, en Vélez, es la siguiente: Emiliano Boffelli; Bautista Delguy, Matías Orlando, Jerónimo De la Fuente y Sebastián Cancelliere; Nicolás Sánchez y Gonzalo Bertranou; Marcos Kremer, Javier Ortega Desio y Tomás Lezana; Tomás Lavanini y Guido Petti Pagadizábal; Nahuel Tetaz Chaparro, Agustín Creevy y Santiago García Botta. Suplentes: Julián Montoya, Javier Díaz, Santiago Medrano, Matías Alemanno, Leonardo Senatore, Martín Landajo, Bautista Ezcurra y Juan Cruz Mallía.