Aguirre, preocupado por la falta de fútbol
A 80 días de su último partido oficial, debuta ante Flamengo, en el Maracaná, en el certamen que supo ganar en 2014
El recuerdo aparece lejano, difuso. En medio de la crisis que gobierna al fútbol argentino, San Lorenzo hace cuentas y el número no se vislumbra alentador: 80 días pasaron desde la última vez que jugó un partido por los puntos. La principal preocupación que rondaba en la cabeza de Diego Aguirre hace algunas semanas, el temor de llegar a la Copa Libertadores sin rodaje oficial encima, se terminó de concretar.
El trance interminable en la AFA y la vorágine del día a día no dejan olvidar: aquel domingo 18 de diciembre el Ciclón visitó a Lanús y rescató una igualdad 2 a 2 muy cerca del final, con dos tantos de Martín Cauteruccio, hoy en Cruz Azul de México. Hasta hoy, el viaje pareció eterno, con casi tres meses en el medio. Así, rodeado de imprevistos, San Lorenzo dará inicio a su andadura en el grupo 4 de la Copa Libertadores frente al poderoso Flamengo, en Río de Janeiro. “Intentamos llegar de la mejor manera posible, pero sin fútbol local no tuvimos competencia. Hicimos varios amistosos, era lo que había. Nuestro rival lleva más de un mes de roce, con plena actividad. No llegamos en igualdad de condiciones, no es lo ideal comenzar de este modo la Libertadores”, aseguró Marcos Angeleri en TyC Sports. Para el defensor, sin embargo, la situación en el fútbol argentino amerita esta postura grupal por encima de lo individual. “Me enorgullece que los futbolistas se hayan unido por una causa”, aclaró.
Esa carencia caló profundo no sólo en San Lorenzo: la misma situación le tocó vivir a Racing, Huracán y Arsenal la semana anterior, en sus comienzos en la Copa Sudamericana. El único equipo argentino que tuvo mayor competencia en 2017 fue Atlético Tucumán –cuatro encuentros–, que logró un histórico pase a la etapa de grupos de la Libertadores, tras dejar en el camino a El Nacional de Ecuador y a Junior de Barranquilla. Otro de los jugadores que hizo referencia a la principal preocupación en Boedo fue Rubén Botta, uno de los refuerzos: “Teníamos muchas ganas de jugar. No tuvimos la suerte de arrancar el torneo local para tener partidos oficiales en las piernas, pero ya no hay excusas”. Y destacó Aguirre: “Que haya algo de fútbol y en una cancha histórica es para disfrutar”. Si el certamen doméstico no se reactiva el próximo fin de semana, el Ciclón se enfocará en el cruce del miércoles 15 ante Atlético Paranaense, en el Nuevo Gasómetro.
El estreno azulgrana será en el Maracaná, que no pierde su mística a pesar del deterioro de los últimos meses. Se descarta que habrá un enorme marco de público: hasta ayer, los torcedores del Mengão habían adquirido más de 50 mil localidades. El templo del fútbol brasileño, abandonado tras los Juegos Olímpicos, volverá a recibir un partido oficial, lo que no ocurre desde el 27 de noviembre. Allí, el propio Flamengo se midió ante Santos en la penúltima jornada de la Serie A brasileña de 2016. “Toda la presión será para ellos”, añadió Botta.
Durante el verano, San Lorenzo disputó siete encuentros amistosos, con un saldo de dos victorias, dos empates y tres caídas. “En esos cruces no se juega de la misma manera que cuando es por los puntos. Se verá un mejor equipo”, advirtió el ex jugador de Tigre.
Flamengo empezó su recorrido oficial en 2017 el 28 de enero, cuando venció a Boavista SC por 4 a 1 en el torneo estadual. Luego hilvanó diez encuentros, entre el campeonato Carioca y la Primeira Liga, con números destacados: ocho triunfos y dos empates y el domingo desnudó dudas en su defensa e igualó 3 a 3 en el clásico ante Fluminense; luego cayó por penales 4-2, en la final de la Taça Guanabara. Entre sus figuras se destacan el volante Diego y Paolo Guerrero, que vive un momento estelar: en lo que va del año el peruano ya lleva siete goles.
La lista de buena fe para la Libertadores del equipo brasileño aparece el argentino Darío Conca, que está lesionado y sólo podrá volver a jugar en mayo.
¿Puede dar pelea San Lorenzo en la Copa? Se lo vio optimista al DT Aguirre en una reciente entrevista con la nacion. “Nunca podría decir que no, y más estando en un equipo grande de la Argentina. Es posible, claro que será difícil, pero ¿por qué no?”.