El regreso del VAR en la Copa Libertadores: Atlético Tucumán sufrió la expulsión de Gervasio Núñez

Apenas quedaban algunos minutos para terminar el primer tiempo del duelo de cuartos de final entre Atlético Tucumán y Gremio por la Copa Libertadores , cuando Gervasio Núñez tumbó a Alisson, autor del gol de Gremio. Hubo un empujón. El brasileño se cayó y, sin aminorar su impulso, el argentino se lo llevó por delante. Su botín impactó en la espalda del futbolista de Gremio, que quedó dolorido en el piso. Wilmar Roldán, árbitro del partido en Tucumán, le mostró al exjugador de Rosario Central la tarjeta amarilla.

Segundos después, a Roldán le avisaron por el intercomunicador que había riesgo de error flagrante en la jugada. Es decir, que probablemente la agresión de Núñez era intencional, por lo que el castigo que correspondía era la expulsión y no la amarilla.

Entonces, el árbitro hizo la seña del VAR, cruzó la cancha y revisó la jugada en la pantalla dispuesta cerca de la mitad de la cancha. Le bastó una mirada para decidir, caminar de regreso al campo de juego y buscar al responsable. Los futbolistas tucumanos (Mercier, Leandro Díaz) se apuraron a defender a su compañero. Fue inútil: Roldán le mostró a Núñez la tarjeta amarilla y se la anuló. Acto seguido, le sacó la roja por el VAR.

Núñez se desencajó. A Roldán lo rodearon los futbolistas tucumanos. El expulsado emprendió el regreso a los vestuarios lleno de bronca. "¡El VAR es una mierda!", protestó, ante la mirada del cuarto árbitro. Además de haberse quedado por debajo en el marcador por culpa del gol de Alisson, Atlético se quedaba con un futbolista menos.