Opinión. Esta inseguridad es propia del fútbol
Un país convulsionado por la cuestión de la inseguridad, en el que del tema hablan desde Cristina Kirchner hasta Susana Giménez, es el escenario ideal para que el fútbol se desentienda del problema. De su problema. "¿Cómo no va a haber violencia en las canchas si la violencia está instalada en toda la sociedad?" , se va a decir, seguro, después del enésimo enfrentamiento entre barras bravas, en un nuevo intento por generalizar algo que, en realidad, es muy propio de su ambiente, justamente el futbolístico.
La lucha interna de la barra brava de Boca -en este caso, la protagonista- no tiene nada que ver con todo lo que se está planteando y discutiendo en otros niveles. Es, lisa y llanamente, una lucha mafiosa -o camorrista, ya que está de moda la película Gomorra - por el poder y por un botín, y pocos clubes argentinos, o ninguno, puede jactarse de no estar infectado por ella.
Lejos de las excusas interesadas de los dirigentes y de las condenas voluntaristas pero improductivas de los periodistas, quien más se acercó al diagnóstico fue un observador extranjero. Hace no mucho tiempo, entrevistado por el colega Gustavo Grabia en el diario Olé , el holandés Otto Adang, especialista en mantenimiento del orden público, asesor del tema en la última Eurocopa y coordinador de un equipo de 16 países que trabaja en la cuestión, declaró, tan preciso como crudo: "La solución europea es impracticable en la Argentina. Allá los hooligans estaban concentrados en grupos marginales, sin relación con el sistema. Acá, los barras están vinculados al negocio de manera sorprendente. Tienen pases de jugadores, manejan el merchandising en las calles, estacionamientos, venta de drogas y tienen vínculos con el poder político que asombran. Por eso, el problema en la Argentina es mucho más grave que en el resto del mundo, porque acá hay que cambiar todo el sistema. Mientras eso no ocurra, es naif pensar en reeducar a los barras o generar un vuelco total desde la educación" .
Al hombre -convocado por la Subsecretaría de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos, eso sí- le bastaron unos pocos días, en los que trabajó en un observatorio integrado por fiscales, funcionarios de seguridad, sociólogos y miembros de ONG, para acertar en el diagnóstico más preciso. Y eso que todavía los barras de Independiente no habían extorsionado a... sus jugadores en busca de fondos para viajar al próximo Mundial ni los de Racing habían prometido "balas" a los... suyos si no conseguían resultados. Tampoco, claro, las distintas facciones de la barra de Boca habían regado de sangre las barrancas del Parque Lezama.
De acuerdo con las palabras del holandés, se necesitan soluciones argentinas para problemas argentinos. De acuerdo con los datos de la realidad, se necesitan soluciones del fútbol para problemas del fútbol.
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