Jürgen Damm, el mexicano-alemán que jugará contra River y es el segundo futbolista más rápido del mundo

Es bien mexicano, como los tacos y el tequila. También como sus padres. Pero su nombre tiene raíces muy diferentes: Jürgen Damm. "Mi abuelito es un alemán de ultranza, siempre está atento a la selección teutona. Por él, mi padre y yo, que nacimos en México, tenemos el pase comunitario alemán", explicó en una entrevista el futbolista de Tigres, de 22 años, que mañana, desde las 22, será titular ante River, en el Monumental, por el partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores.

Damm fue una de las grandes inversiones del equipo mexicano para la definición del certamen continental y para el inicio de la nueva temporada. Según los medios locales, el club de Monterrey pagó "entre siete y ocho millones de dólares" por su pase. Pese al interés de equipos europeos, como Roma, principalmente, él y Pachuca, club dueño de su pase y que ya había rechazado en otro mercado una tentadora oferta de Chelsea, aceptaron las transferencia.

Fue allí, en Pachuca, donde encontró su mejor versión. Incluso, luego de los frustrados pasos por Atlas y Chivas, que no lo tuvieron en cuenta, llegó a pensar en un pronto retiro. "Una vez le dije a mi mamá que ya no quería jugar, pensé mejor en dedicarme al estudio, a terminar mi carrera profesional, como administrador de empresas, eso pasó por mi mente. El soporte y el apoyo de mi familia me hicieron recapacitar y seguir en el fútbol", confesó el mexicano, que debutó en Tecos.

"Mi mamá fue la que siempre me incitó a no dejar; ella me llevó desde pequeño a los partidos del colegio y, después de la decepción en mis anteriores equipos, no dejó que abandonara todo", agregó el mexicano, que también tuvo una exitosa prueba en Manchester United, pero el pase no pudo concretarse por "temas administrativos".

Siempre tuvo algo en claro: su deseo de representar a la selección mexicana. "Mi abuelito es alemán de corazón, pero mi papá y yo somos mexicanos. Mi sueño, desde pequeño, siempre fue jugar por México en cualquier categoría, cualquiera puede chequear todas mis entrevistas y siempre pedí jugar con el Tri". Su sueño se cumplió el 28 de marzo de este año, cuando ingresó seis minutos en un amistoso ante Ecuador (triunfo 1-0). Luego, una lesión le impidió disputar la Copa América en Chile.

Su nombre germano recorrió el mundo en los últimos meses. ¿Por qué? Según un estudio que fue avalado por la FIFA, Jürgen Damm es el segundo futbolista más rápido del mundo, sólo superado por la estrella de Real Madrid Gareth Bale. Alcanza una velocidad con pelota dominada de 35.23 kilómetros por hora, mientras que el escocés llega a 36.9 km/h. "La verdad que no tengo ningún secreto, la velocidad no se adquiere ni se trabaja, es congénita, ya la traes, así que no hago un trabajo especial", aseguró.

En el mismo ranking, Cristiano Ronaldo (33.6 km/h) ocupa el quinto lugar y Lionel Messi (32.5 km/h), el séptimo. "Feliz, contento e ilusionado por saber que estoy por encima de dos excelentes jugadores que han demostrado ser los mejores del mundo. Estar ubicado arriba de ellos en la velocidad con la pelota obviamente me motiva mucho y me pone muy contento, sabiendo que me obliga a trabajar aún más para poder marcar la diferencia, así como ellos lo hacen", dijo el mexicano. Pero, ¿quién es su favorito? "Messi, por su humildad y su capacidad para jugar el fútbol".

Una muestra de su velocidad

Ahora, buscará cumplir otro objetivo: ganar su primer título como profesional. "Estamos muy ilusionados por llevar a Tigres y a México en un lugar privilegiado de América. Sabemos que tenemos el plantel y el fútbol para ganar la Copa Libertadores", sostuvo Jürgen Damm en los últimos días. Y avisó: "El miércoles a la noche me veo campeón, dando la vuelta olímpica en cancha de River". Su confianza también es bien mexicana, como él.

Fuente: Marca, TyC Sports, Selección de México, Excelsior y canchallena.com.

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