Lanús-Racing: la Academia festejó en el sur y recuperó el primer puesto en la Superliga

En una jugada, Racing encontró todo: el gol, el triunfo, la punta de la Superliga y que se fuera lesionado el sorprendente y debutante Pedro de la Vega, que con sus arranques explosivos por la izquierda era una preocupación imprevista. De todos los que emigraron de Lanús , a quien más está extrañando es al arquero Andrada. Sara no completa un partido sin algún error que pueda costar caro. Ahora cometió uno que este impetuoso Lanús pagó con la derrota. El exguardavallas de Boca fue impreciso en un pase largo con el pie; cortó Solari en campo rival y profundizó hasta asistir a Cristaldo, que definió con un derechazo cruzado. A 60 metros de ahí, De la Vega estaba en el piso, por una torcedura de tobillo. Lanús protestó porque Racing no tiró la pelota afuera para que fuera atendido, pero en realidad la falla fue de Sara, que le dio continuidad al juego con una salida muy defectuosa.

Sigue en la cima Racing, pero como equipo se debe varios ajustes. La actualidad marca que Centurión, Bou y Cardozo deben esperar en el banco. Las desventuras de Centurión continuaron anoche. A poco de ingresar, salió lesionado.

Tras la ventaja, Chacho Coudet decidió proteger el 1-0 y puso un tercer zaguero central, Donatti, por Licha López, que salió muy enojado, un poco por el reemplazo y otro tanto por una resolución de una jugada previa.

"Vamos vamos, los pibes, vamos vamos los pibes…", cantaban los hinchas de Lanús, que hace menos de un año iba en camino de una final de la Copa Libertadores con otro equipo, más experimentado y jerarquizado. Pero de ese plantel se fueron 19 jugadores para adecuarse a una economía más estrecha. Y quedó este conjunto, en el que hay espacio para los juveniles de las inferiores. Ya asomaron varios en los últimos meses y el técnico regresado/debutante Luis Zubeldía le dio pista a uno nuevo: Pedro de la Vega, de 17 años, sin ni siquiera un partido en la reserva. Oriundo de Olavarría, llegó a Lanús porque las pensiones de River y Boca no le abrieron las puertas. Se ubicó sobre la izquierda, como un extremo, con la obligación de bajar a la línea de los dos volantes centrales, Maciel y Belmonte, para ayudar en la recuperación. Despliegue y atrevimiento demostró desde el primer minuto, cuando cruzó una asistencia para el "Laucha" Acosta.

La apertura y el cierre de la primera etapa fueron para este electrizante delantero, que levantó a las tribunas granates con un derechazo cruzado que exigió una gran atajada de Arias.

Desde las características de la formación, Lanús no quiso mostrarse conservador. Presentó cuatro delanteros, con Acosta y Ribas cerrados, y Pereyra Diaz y De la Vega más abiertos y un poco más retrasados. A Racing le faltaron en el comienzo energía y cambio de ritmo. Una mala salida de Lanús le concedió la ocasión más clara, con una emboquillada de Guillermo Fernández que Herrera despejó sobre la línea.

Bien afirmado atrás en Orban, con el pase limpio y criterioso del chileno Díaz desde el círculo central, Racing fue empantanándose más adelante en los sectores de la cancha que había más agua acumulada.

Tras el gol de Cristaldo, Racing pudo aumentar de contraataque con Solari, Zaracho y Cardozo, con un remate que tapó Sara. Pero también se defendió muy atrás y Arias, seguro y decidido, tuvo que resolver con varias atajadas. Los 4500 hinchas de Racing que estuvieron en la Fortaleza festejaron un triunfo sufrido, apretado, tan valioso que lo elevó a la punta.