Opinión. Quita de puntos: caiga quien caiga

Pasado. Mediados de 2007. Las hinchadas de Nueva Chicago y Almirante Brown cometen graves incidentes. El Tribunal de Disciplina de la AFA decide quitarles a cada club 18 puntos, sanciones casi inéditas para la entidad que preside Julio Grondona, público enemigo del descuento de unidades.

Presente. Los efectos de aquellas suspensiones tuvieron consecuencias en estos días. Los dos perdieron la categoría y bajaron de la B Nacional a la primera B: Almirante Brown de manera directa, pese a que su gran campaña le hubiera posibilitado jugar la Promoción con Gimnasia, de Jujuy, para subir a primera; Chicago tuvo que jugar un ida y vuelta con Los Andes para mantenerse. Perdió. Un año después, cada hinchada mostró distintas reacciones: la de Brown, manifestó un aprendizaje por lo sucedido; a la de Chicago le corresponde una parte grande del descenso: reiteró errores y hasta provocó la salida del DT Ricardo Rezza tras el primer partido de la Promoción.

Futuro. La AFA no tendrá opción. Sus decisiones de 2007, acertadas, ya habían sentado jurisprudencia. Con los descensos consumados, mucho más. Para el futuro, cada episodio de violencia similar a los anteriores, es decir, que derive en una suspensión de acuerdo con su reglamento, no admitirá otro camino más que la quita de puntos. Caiga quien caiga.

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