River y la final de la Copa Argentina: un impacto emocional para proyectar el futuro
Cada vez que River tuvo que levantarse de un duro golpe o debió afrontar un arduo desafío en contextos poco favorables, el técnico Marcelo Gallardo se aferró a un concepto que le ha dado buenos resultados: "Apelar a la rebeldía y tocar las fibras más íntimas". Hoy su equipo necesita, más que nunca, lograr un shock emocional que le permita generar anticuerpos para combatir y paliar el dolor de una de las derrotas más duras del ciclo. Para eso, deberá mantener y potenciar la convicción de que las fortalezas futbolísticas y anímicas tienen vigencia y mucho más para ofrecer.
El recibimiento en el Monumental del domingo pasado, que contó con más de siete mil hinchas, generó un combo explosivo y extraño de sensaciones para el plantel y el cuerpo técnico: se los vio tan emocionados como angustiados por la situación. "Gracias eternas", fue el mensaje de los fanáticos, que apelaron al orgullo para apoyar y levantar el ánimo de un equipo herido.
Con la desazón sobre la espalda, como si se tratara de una mochila difícil de soportar, y tras tener el lunes libre, River retomó ayer por la tarde los entrenamientos con la idea de revitalizar la mentalidad y transformar la lacerante derrota en un aprendizaje para el futuro. Lejos de pensar en cambios rotundos y estructurales, en la intimidad del grupo hay un fuerte deseo de masticar la bronca y lograr una revancha lo más rápido posible.
Hasta el presidente Rodolfo D’Onofrio se ocupó de llevar tranquilidad: "No hay ningún motivo para pensar que Gallardo se está yendo", sentenció en diálogo con radio La Red. Más allá de que la sensación en Núñez es que el Muñeco continuará en su cargo, habrá que esperar hasta fin de año para conocer el futuro del DT, que realiza un balance en base a tres cuestiones fundamentales: energías, motivaciones y desafíos por delante.
En el corto plazo, tras los partidos ante Newell’s y San Lorenzo por la Superliga, llegará el primer compromiso movilizante para iniciar la recomposición: la final de la Copa Argentina, el viernes 13 de diciembre, en Mendoza, ante Central Córdoba (Santiago del Estero). Además de buscar el undécimo título sobre 15 finales que compuso el ciclo, también intentará asegurarse el boleto directo a la etapa de grupos de la Copa Libertadores 2020, ya que hoy está clasificado a la primera instancia de la competición.
Con una meta clara por delante, a la hora de cambiar el chip, cada integrante del equipo lleva la aflicción a su modo. Algunos visualizan el futuro más rápido, otros logran un consuelo al ampararse en el trabajo y otros precisan de un tiempo adicional para dejar atrás lo que se perdió. Pero existe un horizonte, en el que se vislumbra que no hay deseos de partir: con metas por las que dar batalla, los discursos de los jugadores de replican y los protagonistas coinciden en que en River hay una unión colectiva difícil de encontrar, una plataforma que posibilita trabajar con comodidad.
Así, hoy no existen ni negociaciones ni ofertas concretas, aunque sí hay grandes apuntados que se presentan como posibles ventas al exterior: el defensor Lucas Martínez Quarta, de 23 años, con contrato hasta junio de 2021 y una cláusula de rescisión de 22 millones de euros, y el volante Exequiel Palacios, de 21, cuyo vínculo finaliza en junio de 2021 y tiene una cláusula de 15 millones de euros, son los dos futbolistas con mayor proyección y nombres que ya fueron sondeados por varios equipos europeos.
Frente a la necesidad de recaudar al menos 15 millones de dólares en el próximo mercado de pases para equilibrar la economía de un club golpeado por la devaluación, ambos podrían emigrar. Pero, más allá de alguna otra posible propuesta tentadora que pudiera llegar, no está en los planes de los dirigentes ni del cuerpo técnico ensayar cambios masivos.
Sin futbolistas que deban renovar contratos en diciembre, hay siete negociaciones que deberán definirse antes de junio de 2020: Germán Lux, Enrique Bologna, Kevin Sibille, Javier Pinola, Enzo Pérez, Leonardo Ponzio e Ignacio Scocco. Hoy, mientras las negociaciones ya están en curso, la continuidad de los tres primeros es una incógnita, mientras que Pinola y Enzo Pérez son dos nombres esenciales a retener para la estructura del equipo. El futuro de Ponzio estará supeditado al posible retiro del volante, mientras que Scocco podría analizar un regreso a Newell’s.
Por otro lado, son varios los jugadores que buscarán potenciarse en la pretemporada para mostrar mejores versiones: Lucas Pratto, Juanfer Quintero, Fabrizio Angileri y Bruno Zuculini, son algunos de ellos. Quizás, el hombre del momento es Pratto, uno de los más afectados por la derrota en Lima: sin consuelo tras el error que derivó en el primer gol de Flamengo, se lo vio muy afligido y llorando en los pasillos del hotel tras la final. Pero lejos de pensar en bajarse del proyecto, el Oso ya piensa en una rápida revancha para recuperar su imagen.
"La mejor medicina a una buena victoria es una derrota. Ese es el antídoto". La frase que Gallardo disparó en abril pasado en una entrevista concedida a la Conmebol se viralizó en las últimas horas y los hinchas de River se ampararon en sus palabras, soñando con una rápida reivindicación y un futuro a su lado. El presente marca que, por ahora, siguen teniendo con qué creer.
Más leídas de Fútbol
Agenda llena. Entre el torneo local y las copas internacionales, once equipos argentinos entrarán a jugar cada cuatro días
Una pasión... ferroviaria. Mientras arreglan la cancha, los hinchas alentaron desde la estación... pero no hubo final feliz
"El Zapatero de la Nación". El final de la sociedad más exitosa del fútbol mundial: Alemania rompe su historia con Adidas