La joven monarquía abre otra etapa del ajedrez nacional

El rey Diego Flores, de 30 años, y la reina Florencia Fernández, de 22, ya conocen las peripecias de pertenecer a la realeza del ajedrez argentino; pueden recitar a dúo el soneto que enseña que lo que el árbol tiene de florido vive de lo que tiene sepultado.

Es que ambos aprendieron a guardar sin olvido aquel pasado atribulado, cuando junto a los integrantes del equipo olímpico argentino sintieron y padecieron el desamparo de la anterior dirigencia de la FADA; una gestión que se desmadró tras los Juegos de Estambul, en 2012. Por eso, ahora, los jóvenes monarcas disfrutan del presente luminoso tras las conquistas de los campeonatos superiores de 2013, realizados en Chaco y San Luis, respectivamente. Un logro que los clasificó para representar al país en la Olimpíada de ajedrez, en Tromso, Noruega, en agosto del año próximo.

"El cambio de conducción en el ajedrez argentino fue un avance enorme; con la asunción de Mario Petrucci y Raúl Bittel, más el apoyo de la Organización Duchamp, con Eduardo Moccero, se están haciendo mejor las cosas y se percibe que a los jugadores se los respeta", explica Fernández.

"De la anterior conducción no quiero hablar más; todos saben lo que sucedió. Quiero mirar hacia adelante y alegrarme de las cosas positivas que se lograron en tan corto tiempo con la nueva FADA. El armado del calendario de torneos, la regularización de los campeonatos argentinos, la invitación del sueco Ulf Andersson para entrenar a los maestros y las condiciones de los campeonatos en Sáenz Peña (Chaco) y Estancia Grande (San Luis). Creo que son grandes señales, aunque haya mucho por mejorar aún", agrega Flores.

Aunque Florencia (hincha de River) y Diego (fana de Boca) arrastran experiencia de reinados -ella obtuvo los campeonatos de mujeres en 2009 y 2013, y él entre los varones en 2005, 2009, 2012 y 2013-, son apenas dos sobrevivientes del ajedrez argentino; una actividad que nació en el país hace más de 300 años, que atrajo aficionados de a miles y a maestros por decenas, pero que sólo sostiene a un puñado de cuentapropistas, los que son capaces de vivir con lo que generan.

"Sólo los 50 mejores jugadores del mundo viven de los premios de los torneos; los demás tenemos que dedicarle horas a la enseñanza, a tener alumnos. Mi principal ingreso pasa por el cobro de clases, y en ese sentido fue muy valioso que la Universidad de La Punta (San Luis) me contratara para dar clases por Internet a tres talentos de esa provincia" (Flores).

"Como dice Diego, la mayoría vive de las clases; en mi caso, además de vivir aún con mis padres, me las arreglo con lo que gano en los torneos, alguna beca y las invitaciones para representar a tal o cual equipo" (Fernández).

-¿La conquista del campeonato argentino los convierte en los mejores ajedrecistas del país?

- Personalmente lo tomo como haber ganado un torneo muy fuerte, con la mayoría de los mejores jugadores del país; pero no me siento el mejor, ni ello me inquieta. (Flores).

-Es la alegría del momento, algo que sucedió y punto. Sé muy bien que la mejor ajedrecista del país es Carolina Luján (Fernández).

-¿Y qué se admiran uno del otro?

-A Flor la conozco desde chica y creo que tenemos similares virtudes y los mismos defectos. Siempre me agradó su golpe de vista y estilo agresivo. Tal vez deba mejorar su repertorio de aperturas.

-Diego es un jugador súper talentoso; si estudiara a fondo estaría entre los 50 mejores del mundo. Me gusta su juego de ataque.

Diego Flores y Florencia Fernández son los jóvenes monarcas que comprobaron que no se goza bien lo gozado sino después de haberlo padecido. Apuestan por una nueva etapa del ajedrez argentino; con ellos, no todo está perdido.

• "Son muy talentosos; si se dedicaran sólo al ajedrez nos darían enormes satisfacciones. Flor pronto será gran maestra y Diego ya es casi puntano; trabaja con nosotros y nos enorgullece que nos represente"
  
  Claudia Amura / Gran maestra radicada en San Luis
• "La FADA organizó los torneos superiores clasificatorios para las olimpíadas de manera federal; los juveniles en Córdoba, el absoluto en Buenos Aires y Chaco, y el femenino en San Luis. Estamos masificando el ajedrez"
  
  Ing. Mario Petrucci / Presidente de la FADA