Grupo B. Los hooligans se movilizaron y armaron una fiesta a su medida
Cerca de 4000 festejaron el triunfo de Inglaterra en el estadio; hubo 40 detenidos por incidentes aislados
FRANCFORT (De un enviado especial).- Tony y David caminan tranquilos por una de las avenidas cercanas al Römer, el barrio antiguo de la ciudad, cada uno con una lata de cerveza en la mano. Los dos dicen tener 30 años, aunque su aspecto y sus avanzados abdómenes parecerían indicar algunos más. Tienen apuro por meterse en esa marea de ingleses que copó la Dom Platz y también las orillas del río Main para ver el debut en las pantallas gigantes dispuestas sobre el agua.
Al mejor estilo cancha , las banderas de Inglaterra cuelgan en las ventanas del ayuntamiento. La policía no está en condiciones de impedirlo y, entonces, toma una postura de observación. Algunos, hooligans con todas las letras . Otros, apenas fans de Owen y de Rooney. Algunos, estuvieron en la cancha; en cambio, la gran mayoría vino a esta ciudad sin entradas para vivir el comienzo del Mundial enfrente de alguna pantalla de televisión, pero siempre con un vaso de cerveza en la mano.
David toma la iniciativa y en un cartel escribe "I need tickets" (necesito entradas). "Creo que aquel chico que está allá compró una entrada en la reventa. Pero creo que pagó unos 500 euros", le aconseja Michael, otro inglés sentado en la puerta de una de las cervecerías más grandes de la plaza, a pocos metros de los puestos de comidas instalados en la Fan Fest. Tony mira preocupado y sugiere: "Mejor será quedarnos acá. No podemos gastar tanta plata, sino vamos a tener que devolver la casa rodante que alquilamos".
¿Habrá problemas? "No creo", contesta David. "Yo creo que todo será tranquilo. El consumo del alcohol es mucho en las calles, pero la idea es pasarla bien. Entiendo que entre nosotros haya gente violenta y otra que al tomar pueda ponerse agresiva. Ese no es nuestra intención", agrega antes de ponerse a contar los dos euros que le permitirá comprar un vaso mediano. La larga lista de antecedentes sobre hordas de hooligans devastando todo a su paso por los mundiales hacían temer inconvenientes, más allá de las complejas y abrumadoras medidas de seguridad que se instrumentaron por aquí.
Los comandos de la Polizei, vestidos con trajes verdes, estuvieron por todos lados en las calles de Francfort. Unos 4.000 fueron dispuestos por el Ministerio del Interior, que informó que hubo 40 detenidos por incidentes aislados. Sea como fuere, la de ayer era la primera prueba concreta sobre el funcionamiento del vasto despliegue de seguridad preparado para prevenir inconvenientes eventualmente provocados por fanáticos ingleses. Habrá qué ver qué ocurrirá en los días que restan de este Mundial.
25 fue el gol en contra que marcó Gamarra en la historia de los mundiales desde 1930; sucede en la lista al español Carles Puyol, que batió su propio arco ante Paraguay, en la victoria de España 3 a 1 en Corea y Japón 2002.
lanacionar