River. Montenegro cambió el humor
El Rolfi no acordó su continuidad, pero igual se presentó en la práctica de ayer; Passarella volvió a sonreír
La llamada telefónica de Daniel Passarella tuvo el efecto deseado. El técnico le había solicitado a Daniel Montenegro que se reincorporara a las prácticas y, aunque los dirigentes millonarios todavía no resolvieron la compra de la mitad del pase del jugador, el futbolista se presentó ayer en el Monumental. "Todavía no hay nada arreglado", comentó un allegado al cuerpo técnico. La misma persona también dejó en claro que la demora en las negociaciones tiene un trasfondo: "Hay una deuda y la cifra que se le debe no es poca", añadió.
Igualmente, la sola presencia del Rolfi le dibujó una sonrisa al Káiser, que en el primer entrenamiento de la pretemporada -el miércoles último- se marchó sin hacer declaraciones y con un evidente enojo por la falta de soluciones respecto a las situaciones contractuales de Montenegro y el paraguayo Julio César Cáceres -River debe pagarle 2.000.000 de dólares a Nantes, de Francia, para hacer uso de la opción de compra-, más la ausencia de noticias por Fernando Belluschi.
Las dos últimas reuniones que se produjeron entre los dirigentes y los representantes de Montenegro, Alejandro Bouza y Omar Lavalle -también propietarios del porcentaje en cuestión-, no arrojaron novedades. Los empresarios imponen como condición que al momento de la firma se abone 1.250.000 dólares -la operación asciende a U$s 2.200.000 -, mientras que el monto que le adeudan al futbolista rondaría los 400.000 dólares.
"El jugador quiere continuar en el club, se siente cómodo. Durante el semestre último demostró que está en un gran momento de su carrera, y para nosotros es importante para los diferentes esquemas tácticos que plantea Passarella", confió un integrante del cuerpo técnico. Montenegro fue uno de los futbolistas de mejor rendimiento y, a pesar de sufrir un par de lesiones que lo marginaron de encuentros importantes, siempre fue una pieza considerada vital para el entrenador.
El Káiser aguarda por las soluciones, aunque por ahora en River reina la incertidumbre. La llegada de una nueva oferta de Sevilla, de España, por Jonathan Santana, podría convertirse en otro golpe desalentador para el entrenador millonario, que pidió a los dirigentes que no se desintegrase el plantel. "Esperamos que se llegue a un acuerdo antes del lunes así podemos viajar a la pretemporada -se realizará en Mar del Plata-, con el grupo completo", expresó un ayudante del Káiser , aunque el ceño fruncido indicaba que no será sencillo.
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