Grupo C | Para el tercer partido. Pekerman piensa más allá de Holanda y evalúa reservar algunas piezas
El desgaste físico y el riesgo que pesa sobre algunos jugadores de acumular la segunda tarjeta amarilla y quedar marginados para los octavos de final serían los argumentos del entrenador de la Argentina para darle descanso a Saviola, Crespo, Mascherano y Heinze
HERZOGENAURACH.- Ya no se trata sólo de preparar el encuentro del miércoles próximo ante Holanda, sino también de planificar para el mediano plazo. El seleccionado argentino tiene esa ocupación desde que anteayer se aseguró la clasificación para los octavos de final al vapulear a Serbia y Montenegro por 6 a 0. Contra el equipo de Marco Van Basten, que también se ganó un lugar en la siguiente etapa, sólo estará en juego el ordenamiento final del Grupo C. A la Argentina le alcanzará con un empate para finalizar en el primer lugar por poseer mejor diferencia de gol.
Por eso en el cuerpo técnico se evalúa la conveniencia de reservar algunas piezas. Aún no se puede adelantar una formación, pero hay dos aspectos que se tendrán muy en cuenta para elegir a los hombres que enfrentará a Holanda: el desgaste físico y el riesgo que pesa sobre cuatro jugadores de acumular la segunda amarilla y quedar marginados en los octavos de final.
No se debe perder de vista que si la Argentina se adjudica el grupo jugará tres días después (hoy, el rival sería México, aunque también podría ser Portugal o, en una posibilidad más remota, Angola). En caso de terminar segunda, tendrá un día más de descanso.
En cuanto a lo físico, hay varios casos que merecen consideración. Javier Mascherano sufrió una fuerte inflamación en el dedo gordo izquierdo, producto de una patada de Kezman, que fue expulsado por esa infracción. Se le aplicó hielo; si fuera un partido decisivo se lo tendría en cuenta, pero como ante Holanda no hay que salir a quemar las naves
Hernán Crespo arrastra una amonestación y su recuperación física después de los encuentros requiere más cuidados y tratamientos especiales en el gimnasio y con baños de inmersión. El delantero, ya desde el cotejo frente a Costa de Marfil, padece una molestia en la cintura que le repercute en uno de los aductores.
Tanto Crespo como otros jugadores finalizan los encuentros con dolores lumbares y en las rodillas, producto del estado de las canchas. Se hizo una costumbre ver a los jugadores resbalar y no poder mantener la estabilidad. Según explicaron los preparadores físicos Gerardo Salorio y Eduardo Urtasun, se debe a la dificultad para afirmarse en el terreno, que tiene un fondo muy duro y una superficie blanda, ligera, como consecuencia del riego. Los futbolistas ya probaron, sin solución, con botines con tapones altos e intermedios. Ante Serbia, la lesión de Luis González -un edema muscular en el aductor izquierdo que le demandará una recuperación de alrededor de diez días- se produjo cuando se resbaló y su pierna hizo un movimiento brusco al entrar en contacto con un rival. Este inconveniente del tipo de césped no sólo afecta al equipo argentino, pero el vocero de la FIFA, Markus Siegler, dijo ayer que la entidad no recibió ninguna queja de alguna delegación por el asunto en cuestión.
Crespo también podría descansar en atención al recambio y la variedad ofensiva del plantel. Lionel Messi y Carlos Tevez, dos jugadores que calan hondo en el gusto popular y no necesitaron de muchos minutos para demostrar sus cualidades ante los serbios, serían sustitutos de lujo. Tampoco debe olvidarse que Javier Saviola, hasta ahora la gran revelación, tiene una amonestación, al igual que Lucho González y Gabriel Heinze, otro que en los 180 minutos realizó un gran esfuerzo tras una larga inactividad por una operación en los ligamentos de la rodilla izquierda. En la cabeza de Pekerman no está la idea de desarmar el equipo, pero sí la de reservar algunas piezas.
- De Francfort a Leipzig, sin escalas
Si el seleccionado finaliza primero en su grupo, el sábado próximo jugará por los octavos de final en Leipzig. Tres días antes habrá enfrentado a Holanda en Francfort, una posibilidad es que luego se instale en Leipzig, sin volver a la concentración de Herzogenaurach.