Rugby Championship. Michael Cheika: "Los Pumas cambiaron notablemente su forma de juego"

CANBERRA, Australia.– En Canberra todavía no hay rastros de la aproximación de la primavera. El Weetangera Primary School es la sede de entrenamientos de los Wallabies y mientras algunos jugadores corren por una cancha y brindan una clínica a los alumnos, el entrenador Michael Cheika trata de resguardarse de los 5 grados de sensación térmica. Al frente de su seleccionado desde 2014, al australiano de padres libaneses se lo nota preocupado por los problemas institucionales del rugby local. La salida de Western Force del Súper Rugby propició un estallido en lo que aquí se conoce como “rugby union”. “Desde mi punto de vista precisamos de la colaboración de todos. Tenemos que estar unidos para hacer que el juego mejore. Más ojos en el juego, más interés de los simpatizantes, más recursos para aumentar la exposición de nuestro deporte”, comenta, metódico y pausado, antes del choque de mañana con los Pumas.

–¿Cómo ve el presente de los Wallabies?

–Estoy bastante contento por la dirección que estamos tomando. Sé que tuvimos un primer tiempo muy malo en el partido inicial contra Nueva Zelanda. Pero ya en el segundo cruce exhibimos una interesante recuperación, hicimos un buen planteo y debimos ganar ese encuentro. Y considero que el fin de semana pasado nuevamente planteamos bien la estrategia, pero no nos alcanzó para triunfar frente a Sudáfrica. Nuestro equipo es un conjunto muy joven que está aprendiendo, con nuevos liderazgos, y estamos buscando cómo ser consistentes durante los 80 minutos.

–¿Por qué Australia todavía no obtuvo una victoria en este certamen?

–Porque aún no hemos controlado nuestro juego, nuestra mentalidad y nuestro temperamento cuando vamos ganando. Lo de los All Blacks fue increíble: íbamos ganando a falta de tres minutos y se nos escurrió de las manos. Fue un partido vibrante. Y la semana pasada nuevamente íbamos venciendo, por 20-10 con 20 minutos por delante. Es cuestión de controlar el juego, y eso vendrá de la mano de la experiencia. En los últimos 15 o 16 meses tuvimos a 20 jugadores debutando con la camiseta de Australia. La mayoría de ellos son apenas jóvenes que, cuanto más jueguen, mayor experiencia van a ir adquiriendo.

–¿Qué desafíos enfrenta el rugby australiano en la actualidad?

–Hay algo que es obvio: principalmente tenemos muchos desafíos por fuera del terreno de juego. No hemos tenido un gran año en ese aspecto y todo eso se trasladó automáticamente adentro de la cancha. Contamos con muchos problemas en el Súper Rugby, no sólo en los resultados sino con la salida de Western Force. Creo que el principal desafío se trata de reunificar el juego. A partir de eso, debemos unir a todos los actores importantes de nuestro rugby: los clubes, los juveniles, los equipos profesionales y los Wallabies, todos alrededor de un mismo objetivo. ¿Cuál sería este objetivo? Disfrutar y ser exitosos jugando a nuestro deporte. Estamos muy separados en los distintos niveles. Pero ahora viene una nueva conducción en la Unión australiana que tendrá este importante objetivo por delante.

–¿Les resulta competitivo jugar contra una Argentina que quizás hoy está unos escalones más abajo?

–Por supuesto. Son un excelente equipo y los juegos entre los Pumas y Australia han sido muy buenos en los últimos tres o cuatro años. Son partidos con mucha emoción, con movimiento de pelota, muchos tries. Creo que la Argentina puede vernos como un rival por vencer en el torneo y para nosotros es una obligación cumplir con nuestro potencial. Va a ser un partido muy duro para los Wallabies.

–¿Qué diferencia encuentra entre los Pumas que debutaron en el Rugby Championship en 2012 y los Pumas de la actualidad?

–Si bien en 2012 yo todavía no era parte del equipo australiano creo que desde que comenzaron en esta competencia los argentinos cambiaron notablemente su forma de juego, se concentraron mucho más en mover la pelota y tacklear. Hoy usan menos el kick con respecto a cómo lo hacían antes. En este tiempo es un equipo prácticamente nuevo ya sin figuras muy importantes que se fueron retirando en 2012 y 2013, como Roncero y Felipe Contepomi. Desde entonces crearon un nuevo estilo de juego. Ahora están mucho más acostumbrados a jugar contra los equipos del hemisferio sur y esa experiencia será beneficiosa. En definitiva, modificaron la forma de su juego, pero su esencia sigue intacta: son muy competitivos, muy apasionados y siempre es exigente jugar contra ellos.