San Fernando, su renacer y el recuerdo del Pato

Si el rugby no está acompañado de la nobleza, no es rugby". La definición le corresponde al Pato Luis García Yañez, un emblema de este deporte que se fue de gira hace 8 años. Puma del 65, médico del seleccionado durante un largo período, y querido y respetado por todo el ambiente, el Pato se formó en San Fernando, un club en el cual además fue campeón de natación y de remo, además de destacarse en básquetbol y salto en alto. "Superman vive en San Fernando", tituló LA NACION en la década del 60, cuando viajó del puesto de apertura al de pilar, conformando con Ronald Foster y Ricardo Handley una de las mejores primeras líneas de la historia de los Pumas.

García Yañez murió el 14 de diciembre de 2010. Unos días antes, su club, San Fernando, descendía de categoría tras haber sufrido a fines de 2009 una escisión de la cual surgió Delta Rugby y que dejó a la tradicional institución de la zona norte del Gran Buenos Aires casi sin jugadores. En 2009, precisamente, había logrado el ascenso al por entonces Top 14 de la URBA. La reconstrucción llevó tiempo y en esta temporada San Fernando pegó el salto a la Primera A, la categoría inmediatamente inferior al Top 12. Un viaje difícil pero fructífero para regresar a los primeros planos del juego del rugby doméstico.

En aquel traumático 2010, Franco Correa subió a la Primera junto a varios de sus compañeros y amigos de la camada 1990. Hoy es el capitán. "Es difícil describir ese momento, porque fue lindo por un lado, ya que me tocaba llegar a la Primera, pero muy complicado por el otro, ya que éramos muy pocos, con muchos chicos y otros grandes que decidieron volver a jugar para poner el hombro", señala a LA NACION el apertura del club que selló el ascenso tras ganarle el repechaje a Liceo Naval por 27-24.

Luego de ese descenso a lo que por entonces era el Grupo I, San Fernando volvió a bajar al GII y ahí se quedó, pero un par de veces en estos años estuvo a punto de irse al Grupo III. En una oportunidad venció en el repechaje a Atlético y Progreso con un penal en tiempo extra, y en la otra superó a Los Cedros sobre el final. Correa estuvo en ambas. "Fueron los tiempos más difíciles. Nos entrenábamos y hacíamos las cosas bien, pero llegaba el sábado y perdíamos. De todos modos, nos sirvió para hacernos más fuertes", agrega Correa.

Martín Albani, capitán general de rugby de San Fernando, también pinta lo que vive y vivió el club: "Fueron años desde 2010 de mucho esfuerzo entre todos y fuimos llegando a este presente, que quizás ayude a que sigamos creciendo. Hoy tenemos un plantel superior de casi 100 jugadores y en total, entre juveniles e infantiles, son 480, pero el objetivo a fines de 2019 es llegar a 700". En cuanto al juego, en esta temporada se convocó a un coach rentado, Pablo Candia, hombre de Olivos. "Él se acopló rápido y nosotros lo incorporamos de igual manera. Fue como si toda la vida hubiese sido de San Fernando", completa Correa. Candia formó dupla con Andrés Mirani, del riñón de San Fernando.

La Primera A 2019 será altamente competitiva. Además de San Fernando estarán Champagnat, Banco Nación (con Hugo Porta como flamante presidente), San Martín, Buenos Aires, Deportiva Francesa, Pueyrredón, Mariano Moreno, SITAS, Los Tilos, Lomas, San Carlos, San Albano y Olivos. "El objetivo será mantenernos, porque nos esperan partidos muy duros todos los sábados", cierra Correa. San Fernando, el club del Pato García Yañez, el club que es un emblema de ese partido del Gran Buenos Aires, tiene al rugby reconstruido.