Suárez es el segundo finalista

Mucho se habló entre los equipos del Argentino Abierto de la importancia que da jugar muchos años juntos. Y, de alguna forma, este pensamiento es extensivo hacia cualquier competencia del polo. Algo de eso ocurrió en el triunfo de Coronel Suárez (Valley) por 14-10 ante La Cañada (Legacy), en la segunda semifinal de la Copa Cámara de Diputados.

Es que Coronel Suárez logró un triunfo inobjetable gracias al orden de su equipo, conseguido por los años que llevan juntos Juan y Sebastián Harriott y Juan José Brané. Ahora, Coronel Suárez se medirá en la definición con La Irenita (Embriones), que anteayer superó a Pilar Chico por 11-9; ayer, Matías Mac Donoug de La Irenita, estuvo en Palermo tras la operación de anteanoche en el temporal izquierdo: se recupera rápidamente y espera jugar la final.

El triunfo de Suárez se edificó de principio a fin. Estuvo arriba en el marcador en los 49 minutos de partido, después de que Juan José Brane abrió el marcador en el primer chukker. Y justamente el N° 2 fue la gran figura de la cancha. Fue un verdadero todoterreno: estuvo en todos los lugares, ayudó en defensa, aportó y mucho en ataque, y estuvo preciso en los penales. Un detalle inédito: tan exacto estuvo que recibió una ovación simplemente por pegar un backhander milimétrico en la mitad de cancha que sirvió para abrir el juego.

El orden de Suárez fue mucho más que el ímpetu de La Cañada. Sus hombres erraron demasiados penales y dieron un paso atrás en su funcionamiento en comparación con lo que habían demostrado en los dos cotejos anteriores de la competencia. Sobre todo en el medio juego, donde a José Ignacio Araya y a Mariano González no repitieron sus buenas tareas anteriores. La Cañada sólo mostró fervor, poco para vencer a un conjunto tan prolijo como ayer fue Coronel Suárez.