La argentina, en otro capítulo por la ensaladera recibirá a Suecia en Parque Roca. El favoritismo que habrá que revalidar rumbo al gran sueño
Con el rótulo de candidato, el equipo dirigido por Alberto Mancini intentará extender su serie invicta en el país, ante un rival con mucha experiencia, pero que no rinde a pleno sobre el polvo de ladrillo
La hoja de ruta que sigue la Argentina en busca de conquistar la Copa Davis tiene este fin de semana un segundo capítulo. Como en los últimos dos años, Suecia vuelve a aparecer como obstáculo en el camino del equipo que dirige Alberto Mancini, en una serie que se jugará desde hoy, a las 10, en el estadio Mary Terán de Weiss, en Parque Roca.
Según el sorteo que se realizó ayer, David Nalbandian será el encargado de abrir el espectáculo frente a Thomas Johansson; a continuación, José Acasuso se medirá con Robin Soderling, el primer single visitante. El vencedor avanzará a las semifinales, con un ojo puesto en lo que suceda en Moscú: si gana Rusia, el equipo de Shamil Tarpischev deberá venir a Buenos Aires en septiembre; si avanza la República Checa, habrá que salir de visita.
Pero antes de mirar muy lejos en el horizonte, conviene detenerse en lo que puede suceder en este fin de semana en el complejo de Villa Soldati. Una serie que puede llegar a tener algunas semejanzas respecto de aquel categórico triunfo por 5-0 de febrero de 2006, pero parece muy distante de la caída que sufrió en Gotemburgo el equipo de nuestro país por 4-1, hace doce meses.
Una década de invicto como local -incluidos 11 triunfos sucesivos-, con ese polvo de ladrillo que parece desquiciar a los adversarios; además de una formación poderosa, con la posibilidad de realizar variantes sin que se resienta en exceso la estructura, le dan firmeza al rótulo de favorito que tiene la Argentina para este partido. Nalbandian, por talento y personalidad, es el eje sobre el que se apoya el equipo, afirmado a su vez sobre Mónaco, Cañas y Acasuso, tres singles de distintas características que confirman la riqueza técnica del plantel. Recuperado de una fatiga muscular, Nalbandian también suma ese plus de motivación que le genera jugar la Davis.
Con el unquillense confirmado desde el comienzo, Acasuso fue el elegido por el capitán Mancini como segundo jugador. La incertidumbre alrededor del puesto de single 2 dominó la semana de entrenamientos. El capitán meditó una y otra vez las distintas posibilidades. Dentro de un nivel de mucha paridad, evaluó lo que puede suceder, no sólo hoy, sino a lo largo del fin de semana. El buen momento del misionero, su tipo de juego y los buenos rendimientos que tuvo en la Davis aparecen como fundamentos más que respetables en la determinación de Mancini. "Hay que salir a buscar todos los puntos. El equipo está capacitado para ganarlo todo. No se puede especular con ganar un punto u otro", señaló Luli. La premisa es clara: no hay que dejar pasar ninguna oportunidad, sobre todo si se trata de cerrar la serie cuanto antes.
En los ensayos, no hubo más sobresaltos que aquel resbalón de Nalbandian sobre un pozo que casi le cuesta un problema en el tobillo -y un susto para el capitán-, pero sin consecuencias. Cuesta creer que el polvo de ladrillo que albergará una serie tan trascendente no esté en perfectas condiciones, pero es lo que sucedió.
El resto transcurrió con mucha tranquilidad, sin cortocircuitos; hasta fue una grata sorpresa disfrutar el picadito que se armó el lunes a última hora, en medio de un clima muy distendido. En esta cuarta temporada como conductor de la ilusión argentina, Mancini acentuó uno de los fundamentos de su propuesta como capitán: espíritu de equipo, unidad de conjunto y disponibilidad plena de los jugadores. Mónaco y Cañas ya habían dado una señal dos meses atrás, ante los británicos: al margen del equipo por lesiones, se acercaron a alentar desde el banco. Los dos se bancaron ahora el hecho de esperar otra oportunidad como suplentes. Hubo dos cambios respecto del conjunto que se impuso por 4-1 a Gran Bretaña en febrero último: afuera se quedaron Sebastián Prieto y Agustín Calleri; el cordobés siempre estuvo listo para jugar, pero el capitán optó por otros nombres. La convocatoria tampoco alcanzó a Del Potro, Chela... Sólo hay lugar para cuatro: es parte del mal trago de tener tanto material para elegir.
Del otro lado, no hay grandes misterios. No le sobra material al legendario Mats Wilander, que dispuso un plantel casi idéntico al que vino hace dos años, con el ingreso de Robert Lindstedt por Simon Aspelin como especialista en dobles. Aunque no conviene descuidarse ante un rival con mucho oficio copero. El capitán sueco tiene definida su estrategia: jugarse hoy al single de Soderling para terminar 1-1, y ganar el dobles para llegar al domingo en ventaja y volcarle toda la presión al local. Wilander tiene más claro que nadie que un 0-2 será una cuesta irremontable, aun cuando Suecia sea un especialista en revertir resultados desfavorables. De hecho, lo hizo en febrero último, ante Israel, cuando pasó del 1-2 al 3-2. Pero el polvo de ladrillo porteño es una dificultad extra.
Wilander insistió una y otra vez con Soderling, que estuvo mucho tiempo sin jugar por una lesión, y volvió en febrero último, con buenos resultados. ¿Tanto mejoró su juego sobre polvo de ladrillo desde 2006 para que pueda poner en riesgo el éxito local? Por lo pronto, habrá que recordar no juega un partido oficial en esa superficie desde hace nueve meses. Mancini entregó un análisis de lo que espera: "Es temperamental, saca bien y le pega fuerte tanto de derecha como de revés. Si está al ciento por ciento, puede complicar a cualquiera". La incógnita se develará hoy. El juego plano de Johansson no debería complicar en exceso, aun cuando debe respetarse su experiencia. Otra preocupación para Suecia es el público, al que considera excesivamente ruidoso.
Por séptimo año consecutivo, la Argentina está entre los ocho mejores de la Copa Davis, ese trofeo que persigue con obstinación. El sorteo y los resultados de la primera rueda entregaron señales para evitar algunos cruces comprometidos. Sobre el polvo de ladrillo de Parque Roca, el objetivo es convertir a Suecia en otra víctima del largo invicto que se sostiene como local. Al fin y al cabo, para esta Legión, no hay nada mejor que jugar en casa.
- El rookie Mónaco
En la cena oficial, en la Legislatura porteña, Mancini presentó a Mónaco como "el rookie" ("novato") como local y pidió que hablase. El tandilense se prestó y dijo: "Estoy orgulloso de formar parte del equipo argentino. Ojalá podamos ganar para seguir adelante en la Copa".
- Suecia, como Boca
Otra anécdota de la cena. Henrik Kallen, secretario general de la Asociación sueca, finalizó su discurso diciendo: "Tenemos un gran equipo, como lo es Boca acá, que tiene los mismos colores de nuestra bandera". - La fundación
El lunes próximo, a las 15.30, en el hotel Sheraton, se presentará la Fundación David Nalbandian. Allí se explicarán el funcionamiento de los programas y los proyectos iniciales.
- Diego no, Bati sí
Diego Maradona volverá de Oriente el martes próximo y se perderá el match ante Suecia, pero Gabriel Batistuta y su esposa ya tienen sus ubicaciones y casi con seguridad estarán mañana.