De viaje. El nuevo Pelé
LONDRES.- Usualmente, Wimbledon es, por lejos, el centro deportivo de la prensa inglesa durante las dos semanas de competencia, con miles de minutos en televisión y millones de centímetros en los diarios. Pero las cosas son distintas esta vez: por estos días, Londres vibra al ritmo del fútbol, y en este 2004, la Eurocopa ha desplazado al tercer torneo de Grand Slam de la temporada. La victoria de Inglaterra sobre Croacia por 4-2, con otra brillante actuación del juvenil Wayne Rooney, fue la tapa indiscutida en los principales matutinos de esta capital, y la cantidad de páginas dedicadas a todo lo que sucede en Portugal supera por amplio margen la cobertura de la jornada en el All England.
Por aquí ya se publicó todo sobre Rooney, el artillero de 18 años que anotó cuatro goles en la Eurocopa y condujo a Inglaterra a los cuartos de final, etapa en la que se medirá mañana con Portugal. Se habló del nacimiento, obra, milagros y romances de la vida de Rooney, el joven maravilla. Un chico que juega en Everton, cuyo pase dicen que ahora vale por lo menos 45 millones de euros, y al que por aquí consideran la versión siglo XXI de Pelé. Es cierto que su participación fue decisiva en los dos triunfos ingleses, pero también se palpa el exitismo. ¿Acaso usted creía que era una exclusividad argentina? No, qué va, por aquí también abundan los que baten palmas detrás de la nueva figura.
Aunque no hay sonrisas para todos. Los periodistas croatas en Wimbledon, que anteayer vieron el partido ante los ingleses junto con Goran Ivanisevic, llegan con el rostro abatido y quejándose del rendimiento de algunos jugadores. Tampoco pueden estar felices los españoles, que del papel de favoritos pasaron al papelón de regresar a casa más temprano de lo previsto en una Eurocopa que les dejó un sabor amargo. Y no se salva nadie de las críticas, empezando por el director técnico. ¿Le suena? Esto es fútbol, por supuesto. Hasta el habitual fanatismo por Tim Henman, en un año en el que casi todos aseguran que es la gran oportunidad para el mejor tenista inglés, quedó relegado a un segundo plano. Aquí también se siente ruido de pelota…
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