Lógica pura: Cañas y Gaudio, en la segunda rueda

LONDRES.- Dos victorias y cuatro caídas. En el segundo día de competencia en Wimbledon, se repitió el balance de la jornada inaugural para la Legión Argentina, que así cerró la primera vuelta con cuatro jugadores en carrera sobre un total de doce participantes. La cifra global dista de ser positiva, pero encaja dentro de lo que se aguardaba para una superficie siempre esquiva a las aspiraciones de los tenistas de nuestro país.

En esta ocasión, los triunfos en el tercer torneo de Grand Slam de la temporada llegaron de la mano de la lógica: Guillermo Cañas , 10° favorito, se impuso al alemán Michael Kohlmann por 7-5, 6-4 y 6-4, mientras que Gastón Gaudio (24°) batió a Juan Pablo Guzmán por 6-3, 6-4 y 6-3.

En el caso de Cañas, hablamos de lógica porque volvió a demostrar que es el argentino con mejores condiciones para desempeñarse sobre el césped londinense. Ante Kohlmann, 112° del Sistema, el jugador de Tapiales, que el año último llegó a los octavos de final aquí, levantó varias pequeñas desventajas en los parciales para lograr una victoria en sets corridos, en el último encuentro de la jornada. Un buen triunfo para ajustar los motores del todoterreno , que en la próxima rueda jugará con el español Feliciano López.

Tampoco sorprendió el éxito de Gaudio sobre Guzmán en el choque de argentinos. Más allá de que el segundo venía desde la clasificación con la consiguiente adaptación al césped y las ganas de dejar todo en el primer match de ATP de su vida, Gaudio se impuso con autoridad, subió varias veces a la red y cometió pocos errores.

Gaudio, acompañado aquí por Martín Jaite como coach, obtuvo su primer triunfo en Wimbledon sobre cuatro participaciones. Su próximo rival será el ruso Mikhail Youzhny.

Pero el tiempo de los festejos para la Legión se detuvo en los dos casos citados. Además de la caída de Guzmán, también fueron eliminados Agustín Calleri, José Acasuso y Paola Suárez.

Calleri cayó en cinco sets ante el francés Fabrice Santoro (25° favorito) por 2-6, 7-6 (7-4), 6-4, 4-6 y 6-3, en 3h31m de un partido que generó controversias, ya que el cordobés expresó su disgusto por la tarea que cumplieron los jueces de línea. "No puede ser que en el torneo más importante del mundo los jueces de línea tengan 70 años. No tienen reacción ni reflejos visuales para gente que saca a 200 kilómetros por hora. Para colmo, aquí no queda marcado el pique y lo que cantan es definitivo. No quiero poner excusas: el partido lo perdí porque saqué mal todo el partido, porque tuve puntos para quebrar en el tercer y quinto set y no los supe aprovechar. Podría haberlo ganado en tres sets, pero no pude hacerlo", comentó.

José Acasuso, en tanto, cayó ante el suizo Marc Rosset por 6-3, 7-6 (7-4) y 6-1. El misionero, que llegó con una lesión en la ingle por la que debió abandonar el domingo último en la final de Braunschweig, poco pudo hacer ante un rival que se mueve muy bien en superficies rápidas.

Si hubo una sorpresa fue la caída de Paola Suárez, que perdió con la norteamericana Jill Craybas por 6-4, 5-7 y 7-5. La jugadora de Pergamino, 28ª favorita, sufrió su primer traspié ante Craybas en cuatro partidos y su séptima derrota en primera vuelta aquí en ocho participaciones; lo mejor fue en 2000, cuando llegó a la tercera etapa. "Nunca me sentí cómoda sobre el césped y me voy enojada conmigo misma porque no pude hacer cosas que en otras superficies sí puedo intentar", señaló Suárez, que ayer cometió 15 dobles faltas y 69 errores no forzados.

Hoy, por la segunda rueda, será el turno de Clarisa Fernández (30ª), que se medirá con la belga Els Callens en la cancha 4, mientras que David Nalbandian (28°) jugará con el francés Paul Henri Mathieu, en el court 19.