Novak Djokovic arranca con objetivos fuertes en el territorio de Rafael Nadal
En Montecarlo, empezó la gira europea de polvo, donde Rafa es el rey; Nole quiere extender allí sus éxitos de cara Roland Garros
MONTECARLO.- Monte-Carlo Rolex Masters, el tercer Masters 1000 de la temporada que se inició ayer, ha sido durante años una suerte de bastión para Rafael Nadal. En el principado, el español escribió grandes capítulos de su carrera, consagrándose consecutivamente de 2005 a 2012. Desde allí, a orillas del Mediterráneo, Rafa castigó con sus latigazos de zurda y tomó impulso, una y otra vez, para brillar en su etapa preferida del tour, la europea sobre canchas lentas, y rematar la faena conquistando nueve Roland Garros. Claro que la versión actual del mallorquín luce muy distinta; por lo pronto, vulnerable. Y llegó a Montecarlo con dudas y sólo un trofeo en el año, en Buenos Aires, donde no se midió ante ningún top 50. La tierra batida le sirvió al Matador, tantas veces, de empellón. Pero hay otro galáctico, Novak Djokovic, que aguarda agazapado, con el propósito de construir una muralla sobre la superficie anaranjada y el objetivo final de conseguir el 7 de junio, en Bois de Boulogne, el único Grand Slam que no ostenta.
"La confianza es difícil de ganar, pero fácil de perder. Y lo tengo en mente para mantenerme disciplinado y seguir trabajando. ¿Nadal? Todavía es el rey de la arcilla. Siempre es el último desafío por vencer en tierra. Incluso cuando ha tenido que hacer frente a las lesiones y la pérdida de confianza", expresó Djokovic, según consignó EFE, durante la rueda de prensa en el certamen monegasco. Nole, 1er favorito, que debutará en la 2a rueda ante el ganador de Denis Istomin (Uzbekistán) y Albert Ramos (España), tiene un 78,3% de efectividad sobre polvo de ladrillo en su carrera (144-40, 9 títulos). En Montecarlo, donde fue campeón en 2013, ganó 23 partidos y perdió 7.
Nadal, que cayó al quinto lugar del ranking, explicó: "No hay una gran diferencia entre jugar mal y estar jugando bien. Son pequeñas cosas que terminan produciendo grandes cambios. Tengo que ser más fuerte para ser más regular. No puedo jugar bien algunos juegos y de repente encadenar cuatro errores". Al jugador más importante sobre canchas lentas de la historia, que en Montecarlo es el 3er favorito y jugará ante el triunfador de Dominic Thiem (Austria) y Lucas Pouille (Francia), lo sostienen los números: 92,9% de efectividad en esa superficie (325-25, 46 títulos).
Djokovic, que podría ser el inédito campeón de los tres primeros Masters 1000 del año (logró Indian Wells y Miami), luce un juego que amedrenta y domina. Y que, generalmente, termina convirtiendo los partidos en previsibles. ¿Alguien podrá detener al jugador entrenado por Boris Becker? Si hay una gira donde el serbio puede llegar a bajar es en ésta, sobre polvo, pero su poderío actual hace rememorar a la temporada 2011, donde se llevó a casi todos por delante, logrando un récord personal de 10 títulos en 11 finales (fenomenal marca de 70-6).
En Montecarlo, el último campeón y finalista, los suizos Stan Wawrinka y Roger Federer, van por la zona baja del cuadro. Por la alta, Djokovic y Nadal, podría enfrentarse en las semifinales. En el principado, lugar que muchas veces le sirvió a Rafa de refugio, es donde Nole pretende empezar a hacer mella en un hombre cargado de incógnitas. pero con corazón. La lucha, con París en el horizonte, luce apasionante.
LA LESIÓN DE BERLOCQ Y EL AVANCE DE SCHWARTZMAN EN MONTECARLO
Carlos Berlocq, que anteayer, por un problema en el aductor izquierdo, se retiró de la clasificación del Masters 1000 de Montecarlo cuando vencía 6-4 y 3-2 al sueco Elias Ymer, se realizó nuevos estudios, padece una distensión en la zona y permanecería 15 días en reposo. Volverá a la Argentina para rehabilitarse y decidir en qué torneo regresará al circuito -podría ser en Madrid, desde el tres del mes próximo-.
En tanto, Diego Schwartzman, de 22 años y 62° del ranking, derrotó por 6-4 y 6-4 al español Albert Montañés (34, 105°) e ingresó en el cuadro principal de Montecarlo. Mañana, por la 1a rueda, se medirá -por primera vez- con el francés Jeremy Chardy (28, 35°). En caso de avanzar, Schwartzman se enfrentará con el suizo Roger Federer, segundo favorito.