Carreras | El Gran Premio Selección, en Palermo. Para el aplauso

En un final vibrante, Kespléndida se adelantó a la valiente Taquera por el hocico

23 de octubre de 2005

LA NACION

A falta de grandes figuras, el Gran Premio Selección (G 1), de ayer en Palermo, regaló un desenlace para el aplauso. Kespléndida, montada por Jorge Valdivieso, se quedó con el triunfo luego de insistir casi toda la recta en pos de Taquera, que al filo del disco quedó al hocico, en una actuación casi tan brillante como la de su vencedora.

"Se hizo duro porque [Ricardo] Ioselli la rigoreaba y su potranca volvía. En el final me pareció que había ganado sin verde, pero cuando subieron la bandera no me gustó nada", comentó Valdi luego de dos kilómetros intensos que sirvieron para confirmar la notable evolución de la primera y su escolta.

Fue justamente esta última la que asomó adelante en los primeros metros, hasta que Smart Wells, que había largado en cámara lenta, aceleró de golpe por afuera y se dedicó a enseñar el rumbo. No obstante, el sueño de convertirse en la tercera ganadora del Selección platense que emula el éxito en el Argentino se esfumó antes de ingresar en el último codo.

En ese momento Taquera volvió a la delantera. Podía especularse con que se trataba de un trabajo en equipo para favorecer la arremetida de Baby Melody, pero se notaba que la acción de ambas era muy diferente y que la carta fuerte de la yunta favorita estaba en la punta.

Así también lo entendió Valdivieso en los albores de la recta, cuando ubicó segunda a Kespléndida. "Tenía medida a la de adelante, pero antes de ir a buscarla esperé un poco porque no quería que me sorprendieran de atropellada. Cuando vi que se quedaba Terms Parade me empecé a arrimar y pensé que pasaba de largo", mencionó el jinete mendocino. Sin embargo, faltaba lo mejor.

Taquera, por dentro, se resistía y Kespléndida iba limando ventajas. Hasta que en el último salto la hija de Lode llegó a esa victoria que se le había negado en el clásico Francisco Beazley, cuando perdió en lucha tras una mala largada.

Como en la Polla de Potrancas, cuando venció Vanguarda, el Selección tuvo a una ganadora nacida en el haras Santa María de Araras. Con ella, además, Valdivieso sumó su cuarto éxito en la historia de este cotejo y el segundo consecutivo, tras la victoria del año último con Forty Marchanta.

Rider Stripes, muy fácil"

Ganó galopando; nunca le hicieron fuerza", sostuvo el jockey Gustavo Calvente, tras el triunfo de su potrillo Rider Stripes, por siete cuerpos y de punta a punta, en el clásico Eduardo Casey (G 2-2200 m). Su entrenador, Roberto Pellegatta, adelantó que ahora lo anotará en el Nacional.

Carlos Delfino

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