Carreras | Protagonistas. Un Lobo para sumar triunfos
Por tercer año consecutivo, Horacio Torres ganó la estadística de entrenadores del Bosque
LA PLATA.- Por tercer año consecutivo, Horacio Torres, o simplemente El Lobo, como se le apoda, obtuvo la estadística de entrenadores del Bosque, superando por 24 triunfos a su escolta, Juan Carlos Viviani. Esos 61 éxitos que sumó en 2005 son el resultado del esfuerzo y la dedicación que tiene por la profesión. Son el reflejo de un trabajo que se complementa con dos jinetes casi exclusivos, como Luiz Villalba y Pablo Sotelo; vareadores, capataces y veterinarios.
Reiterarse en el primer puesto podría quitarle emoción a lo que consiguió, pero Torres no lo cree así. "Al contrario. Aunque no hay tiempo para festejos, es una satisfacción personal y de todos los integrantes del equipo", asegura, antes de ampliar su definición: "Terminó otro año muy bueno y ya comenzamos a transitar 2006 con la misma esperanza de siempre: ganar y responderle al propietario. Mis momentos de tristeza son cuando un patrón se lleva un caballo porque no alcanzó las expectativas que tenía".
El apellido Torres tiene en las carreras tantos años como el propio hipódromo de esta ciudad. Aquí trabajaron sus abuelos Andrés Torres y José Peralta y su padre, del mismo nombre. Hoy, a Horacio lo acompañan su hermano Leandro y su primo Rubén. "Con tanto turf por las venas, era difícil que uno, que prácticamente nació en el stud, no siguiera los pasos. Se imaginan que maestros, especialmente con papá, no me faltaron. Y empleando los métodos de ellos y los míos, hoy puedo disfrutar de este excelente momento", sentencia el preparador, de 40 años.
-¿Cuántos caballos entrena actualmente?
-Siempre entre 50 y 60. No más porque me gusta conocerlos a todos. Esa es una cantidad manejable y el objetivo es sacarle el mayor rendimiento a cada uno. Tenga la suerte de llevar quince años cuidándole al haras Dilú y por diez al Agus. Además, cuento con ejemplares de Cumeneyén, de Rodeo Chico y otros propietarios con menos caballos, algunos con uno solo; a todos los preparo con la misma pasión.
-¿Esperaba ganar otra vez la estadística?
-Sinceramente no creía tener posibilidades de emular lo del año anterior. Sobre todo cuando sufrí una suspensión por dos meses, donde mi hermano presentó 9 ganadores. Los caballos maduraron, la mayoría estuvieron sanos y los triunfos se sucedieron. Ganar no es sólo un objetivo personal, sino que es fundamental para conservar al propietario. ¿Si puedo repetir? Es una ilusión, pero no una obsesión. De los caballos que tengo, la mayoría son productos. Hay muchas esperanzas.
-¿Cree que existe una fórmula especial para cuidar?
-Me parece que no hay muchas variantes. Confío mucho en el buen vareo, escuchar a los jockeys y, además, es fundamental que al caballo no le falte nada. Ni una buena cama, ni un remedio, ni un análisis, si lo necesita.
Aunque la mayoría de los casi 400 triunfos que obtuvo en su vida los concretó en el Bosque, El Lobo es un ganador en todos los escenarios. En 2004 había ganado las 2000 Guineas de San Isidro, con el potrillo Now Mont, y en 2005 su mejor éxito fue aquí, con la potranca Minallón, que se vendió tras la Polla.
Será ésta última otra de las grandes conquistas que intentará calcar esta temporada que comenzó hace cinco días, tras un paro de empleados que -dice Torres- "es legítimo, pero a nadie beneficia porque, si no hay carreras, la mayoría perdemos mucho".