A la espera del juicio oral, Taringa! lanza una versión del sitio en inglés
Con Socialphy, la red social nacida en la Argentina busca convertirse en un jugador global y competir con Facebook y Orkut
A la espera del juicio oral en los tribunales porteños, los socios de Taringa! quieren conquistar el mercado norteamericano. Antes de fin de mes, los creadores de la polémica red social lanzarán oficialmente su comunidad en inglés, Socialphy, con el que buscan replicar el éxito que lograron en el mundo hispanohablante.
Taringa! representa el caso máximo de reconversión de una empresa nacida en el límite de la legalidad y que ahora intenta reencauzar su modelo de negocios dentro de los márgenes de la ley. Desde hace un año y medio, el portal argentino empezó a combatir la suba de material pirata, con la mira puesta en posicionarse como un jugador relevante en el negocio del intercambio de contenidos legal y el streaming (el sistema que permite reproducir en forma online música y películas sin necesidad de bajar el contenido a la computadora).
Con Socialphy iniciaron las primeras pruebas a fines de 2011, y si bien el lanzamiento oficial se concretará en las próximas dos semanas, ya parten con una para nada despreciable base de un millón de usuarios únicos por mes. "Empezamos con la idea, cuando descubrimos que mucho de nuestro tráfico venía de los Estados Unidos, donde hoy tenemos 3 millones de usuarios registrados. Obviamente, se trata de usuarios hispanohablantes, pero creemos que pueden ser una buena puerta de entrada para poder ingresar en el mercado norteamericano", explicaron los hermanos Hernán y Matías Botbol, administradores y socios de Taringa! desde sus oficinas centrales, ubicadas a pocos metros de la porteña esquina de Callao y Santa Fe. Para el nuevo proyecto, los Botbol contrataron a empleados norteamericanos que viven en Buenos Aires para que se encarguen de la moderación y el control de los contenidos, que representa una función clave en la comunidad "taringuera".
Los hermanos reconocen que a largo plazo el objetivo es repetir en inglés el éxito que tuvo Taringa! en Iberoamérica. Hoy la red social nacida en Buenos Aires hace ocho años cuenta con casi 20 millones de usuarios únicos registrados, 5,5 millones de visitas diarias y 70 millones de usuarios por mes, lo que la convierte en uno de los veinte sitios más populares en la mayoría de los países hispanohablantes (en la Argentina ocupa el puesto número diez del ranking y supera en usuarios a los portales de los diarios).
Salvando las distancias, en Taringa! confían en que el nuevo proyecto les permitirá poner un pie en las grandes ligas mundiales de las redes sociales y competir contra gigantes, como Facebook, Twitter u Orkut. "Propuestas como Facebook u Orkut buscan trasladar tu vida off-line al mundo de Internet; en cambio, nosotros apuntamos a desarrollar contenidos a partir de un concepto de comunidad, en el que la gente comparte y valora lo que hacen los demás", explicó Hernán Botbol.
Rumbo a Tribunales
El lanzamiento de Socialphy prácticamente coincidirá con la reactivación de la causa que enfrentan los Botbol y su socio, Alberto Nakayama, por la presunta violación del derecho de propiedad intelectual al permitir que a través de su sitio diferentes usuarios compartieran libros y discos. "Es casi imposible que perdamos el juicio porque nos quieren aplicar una ley que data de 1933, cuando no existía Internet", explicó Hernán Botbol. "Es necesario modernizar la legislación para que puedan trabajar todas las empresas de tecnología respetando la propiedad intelectual, pero tomando en cuenta las actuales necesidades de los consumidores", agregó.
Los dueños de Taringa! además destacan que las descargas ilegales de discos, libros y películas hoy ocupan un papel marginal dentro del tráfico de su red social. "A pesar de que mucha gente nos ve como un sitio de descargas, nosotros nunca alojamos este tipo de material, aunque sí había posteos con este tipo de links. Igualmente, las descargas nunca superaron el 20% del tráfico de Taringa! y hoy ese porcentaje no llega al 4%", explicó Matías Botbol.