Bernardo Kosacoff: "La economía ya está perdiendo impulso"

P.- ¿Cómo se distrae de sus obligaciones laborales en sus tiempos libres?

R.- Tenis; la familia –en particular mis tres nietos– y el cine.

P.- ¿Cuál cree que es una buena opción para el veraneo de los argentinos? ¿Cuál es la suya? ¿Playa, sierras, Patagonia?

R.- El país tiene lugares privilegiados para disfrutar con los afectos en las vacaciones. Este año fui a la playa.

P.- ¿Cómo será la evolución del cuadro fiscal este año?

R.- Hemos perdido grados de holgura fiscal. Se puede prever un 2012 con cuentas fiscales más complicadas, pero factibles de ser administradas. La desaceleración de la economía y la caída de la exportación agrícola impactarán negativamente en la recaudación. Como contraparte, la resolución final de los cambios en los subsidios puede dar ingresos públicos adicionales significativos. Se espera un crecimiento del gasto público menor a 2011, en un marco de una ya existente fuerte presión impositiva. Considero que una clave central será mejorar la evaluación social del gasto público, tendiendo que el mismo mejore su impacto en una distribución progresiva de los ingresos y la productividad de la economía.

P.- ¿Qué crecimiento espera para el PBI argentino? ¿Qué áreas serán las que impulsen y cuáles las que vaya para atrás?

R.- La economía está ya moderando su ritmo de crecimiento, perdiendo impulso. Se estima una tasa de crecimiento que no llegará al 4%. El contexto internacional menos favorable y la disminución de los ingresos disponibles de la población determinan esta desaceleración, en un contexto en el cual las políticas públicas tienen márgenes estrechos para generar impactos anticíclicos. El sector agropecuario está afectado por la sequía; la industria está con los motores menos potentes; los sectores exportadores tienen costos crecientes –en un mundo empantanado en crecimiento con crecientes políticas proteccionistas y de devaluación de sus monedas–; la construcción tiene un techo a su expansión en un contexto de precios de terrenos y propiedades cada vez más alejados de los ingresos de los demandantes.

P.- ¿Cómo va a evolucionar el empleo en este contexto?

R.- La creación de empleo será moderada. El desafío en el mercado de trabajo es disminuir su alta heterogeneidad. En los sectores de mayor calificación se observa casi pleno empleo, con una demanda de trabajo que no encuentra personal. En la otra punta, los sectores informales y la población más joven no calificada tiene altos índices de desempleo y vulnerabilidad incompatibles con un desarrollo inclusivo.

P.- ¿Hasta dónde va a llegar la discusión salarial? ¿Cree que será un tema conflictivo?

R.- Es uno los temas complicados, en el cual debe buscarse el equilibrio de la mejora en la distribución de los ingresos y la disminución de la inflación. El aumento de la productividad puede dar una respuesta a este dilema, pero no se genera simplemente con los buenos deseos. Asimismo, en la negociación salarial los sectores formales y sindicalizados del mercado de trabajo tienen una posición más favorable en la negociación, en comparación con los trabajadores informales y cuentapropistas que son, a su vez, los más afectados por la moderación del crecimiento.

El autor es profesor de la UBA
También se desempeña en la Universidad Nacional de Quilmes y en la Universidad Torcuato Di Tella; fue director de la Cepal en la Argentina entre 2002 y julio de 2010.

Bernardo Kosacoff