Buen debut de los bonos públicos uruguayos
MONTEVIDEO.- Los nuevos bonos emitidos por Uruguay para el canje que le permitió estirar plazos de su deuda comenzaron a operar formalmente ayer en las dos bolsas de valores locales y en el mercado internacional, con volatilidad de precios, pero con un nivel de riesgo país muy inferior al que había previo a esta operación.
El gobierno considera que fue un éxito el canje de bonos, debido al alto nivel de adhesión: 92,5% del total de títulos habilitados para la operación, que eran por un monto de 5400 millones de dólares, equivalente a la mitad del PBI de este país.
En tanto, el gobierno no logró resolver un problema político, que genera preocupación en el sistema financiero. Legisladores de izquierda y algunos de partidos tradicionales quieren atender el reclamo de deudores en dólares perjudicados por la devaluación del año pasado con una ley de suspensión de ejecuciones y refinanciación compulsiva. El gobierno hizo un acuerdo con los bancos para garantizar una refinanciación sin ley y negocia con los legisladores para que no voten esa norma. Un conflicto similar al que vive la Argentina con la suspensión de las ejecuciones hipotecarias, y que ha quitado impacto al efecto positivo esperado como consecuencia del canje.
El índice de riesgo país de Uruguay, que al comienzo de 2002 era de unos 200 puntos, había ascendido el año pasado hasta los 3000 puntos; luego descendió y volvió a subir este año ante las dudas de que el gobierno entrara en default. Desde que se lanzó el canje, el riesgo bajó de 2100 a 1700 puntos, pero ayer quedó en 887 puntos.
Los nuevos bonos operaron en los primeros días de esta semana como "derechos sobre títulos", con precios que daban un riesgo de 793 el miércoles y 838 el jueves.
El gobierno había anunciado que concretaría la operación si lograba la participación del 90% del circulante de los títulos locales con vencimiento hasta 2008, e igual porcentaje del monto en circulación de todos los bonos, aunque se reservaba la opción de hacer el canje si recibía al menos el 80% del total.
El monto de todos los bonos habilitados para el canje fue de U$S 5.390.121.236. Vencido el plazo para adherir al plan, se presentaron acreedores con bonos por US$ 4984,6 millones, lo que equivale al 92,48% del total. La adhesión fue más alta con los títulos locales (98,8%) que con los emitidos en el exterior (89,8%).
También se cumplió el requisito de 90% de los bonos con vencimiento en el corto y mediano plazo, que tenían amortización final hasta 2008. Esos bonos (incluidos en el paquete total) eran por US$ 2334,6 millones y el nivel de adhesión fue de 93,6 por ciento.
La fórmula de canje había sido lanzada el 10 de abril e incluyó a todos los títulos en moneda extranjera emitidos a más de un año de plazo en el mercado interno (Bonos del Tesoro, Letras de Tesorería, Previsionales) y en el exterior (Bonos Globales, Brady, Euronotas en dólares y euros, Bonos en yenes y en pesos chilenos y Notas Convertibles).
La menor adhesión se dio en los bonos Brady, cinco series de títulos que habían surgido en la refinanciación de deudas con bancos privados hecha en 1991. Esos títulos tenían cláusulas que daban mayores garantías a los acreedores y la adhesión fue del 59,1%. Incluso en el New Money Notes, con vencimiento en 2006, sólo se presentaron títulos por 25,5% del total habilitado.
En tanto, la mayor adhesión (100%) se dio en los Bonos Samurai, aunque eso fue porque si bien la asamblea de acreedores japoneses votó con una mayoría de 66% la disposición de esos títulos indica que en ese caso la modificación de condiciones (reprogramación de plazos) se aplica a todos. También hubo 100% de canje en los bonos emitidos en Chile, en una "nota convertible" con un banco privado, en bonos de tasa fija con vencimiento en 2005 y en Letras 2004.
Los nuevos bonos incluyen cláusulas de "acción colectiva", que permiten modificar las condiciones por decisión de tenedores que representen 75% del circulante de una serie. Si se pretende cambiar condiciones de más de una serie se exige el aval del 85% del circulante total de las mismas y una mayoría de 66,6% de cada una de ellas.