Buscan facilitar la exportación de conocimiento
Impulsan un proyecto para agilizar los trámites de las patentes
Después de que se aprobara la ley de economía del conocimiento y el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea, el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI), entre otras entidades, está bregando por la aprobación del Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT), que data de 1978, para proteger y estimular al ecosistema innovador.
El PCT tuvo sanción del Senado en 1998, y luego giró a Diputados donde aún no fue tratado, si bien tiene estado parlamentario según lo previsto por la ley 13.640. Este convenio, que cuenta con la adhesión de 152 países, facilita la presentación de solicitudes de patentes en forma simultánea en diferentes naciones. "En América Latina, solo la Argentina, Venezuela, Bolivia, Uruguay (quien ya tiene el proyecto en su Congreso) y Paraguay están aún fuera de este sistema. Ello nos obliga a presentar tantas solicitudes de protección para los inventos como cantidad de países donde quieren protegerlos, a un costo elevadísimo. En cambio, mediante el sistema PCT se puede tramitar una sola solicitud inicial, pudiendo designar hasta 152 países para la protección, con un costo aproximado de US$5000, mientras que, para nuestros nacionales, presentar una solicitud de patente en hasta 50 países tiene un costo estimado de US$150.000", afirmó Damaso Pardo, presidente del INPI.
Una vez ratificado este convenio en el país, tendrá un efecto inmediato en cuanto a la reducción de costos y la simplificación de la presentación de solicitudes.
Además del INTI, apoyan la adhesión de la Argentina al tratado los investigadores del país de varias universidades, la Fundación Sales, la Asociación Argentina de Agentes de la Propiedad Industrial (Aaapi), la Cámara Argentina de Agentes de la Propiedad Industrial (Capira), la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la Asociación de Emprendedores de Argentina (ASEA), el INPI, la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Ciudad de Buenos Aires, la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE), además de todas las cámaras de comercio extranjeras en el país y empresas tales como Bioceres, YPF e Y-TEC.